TRUMP Y NETANYAHU HACEN PÚBLICO SU “TIMO DEL SIGLO”
El llamado “Acuerdo del Siglo” o “Plan de Paz para Oriente Medio” ya ha sido rechazado por la ONU y la Autoridad Palestina
Donald Trump acaba de enviar a su homónimo israelí, Benjamin Netanyahu, el texto del “Acuerdo del Siglo” o "Plan de Paz para Oriente Medio". Se trata, sin embargo, de una propuesta que no se parece en nada a un plan de paz dado que beneficia sólo a una de las partes en conflicto a expensas de la otra. Como ha dicho la periodista Sarah Abed, el texto ni siquiera merece la tinta o el papel con los que se ha impreso.
POR EVA LUGUNERO PARA CANARIAS SEMANAL.ORG.-
Algo de esto se filtró la primavera pasada, como informamos en Canarias Semanal. Esto, que se ha dado en llamar “El Acuerdo del Siglo”, ha visto por fin la luz pública en esta pasada semana. La ONU lo ha rechazado ya, reiterando que la resolución del conflicto palestino-israelí debe basarse en las resoluciones y leyes internacionales así como en los acuerdos bilaterales relativos a las demarcaciones anteriores a 1967.
Pero ya se sabe lo que les importa a Trump y su colega israelí, Benjamen Netanyahu, la legalidad internacional. El presidente de Estados Unidos ha puesto por delante su propio plan, que cuenta con la bendición de la AIPAC (American Israel Public Affairs Committe), corporación pro-israelí con enorme influencia en los poderes legislativo y ejecutivo de la gran potencia.
El que durante estos tres últimos años ha sido el principal consejero (y yerno) del Presidente Trump, el sionista Jared Kushner, ha sido el encargado de redactar el documento de ochenta páginas y el mapa que lo acompaña, el cual demuestra gráficamente cómo Israel usaría esta farsa de acuerdo para proseguir la ocupación ilegal y la anexión de la tierra palestina.
El conocimiento que Kushner posee sobre Oriente Medio se limita a las inversiones en proyectos inmobiliarios que tiene en Israel y a los veinticinco libros que ha consultado mientras preparaba su “acuerdo de paz”.
La “visión de paz, prosperidad y un futuro más brillante para israelíes y palestinos” de Trump, Kushner y Netanyahu contiene una agenda oculta que permitiría a Israel seguir subyugando y asesinando al pueblo palestino mientras ocupa y se anexiona su tierra.
Netanyahu ha dicho que su gabinete va a someter a votación el declarar los asentamientos de Cisjordania y el estratégico Valle del Jordán bajo soberanía de Israel. Ello representaría el 30 por ciento de Cisjordania, territorio ocupado que Israel robó a Jordania durante la guerra de 1967. Sin embargo, es posible que Netanyahu se tope con complicaciones legales dado que el actual gabinete es interino hasta que no se convoquen nuevas elecciones.
Trump y Kushner se mostraban pletóricos mientras daban a conocer su “Timo del Siglo” en la Casa Blanca. Netanyahu no podía refrenar su júbilo cuando dijo que "el Acuerdo del Siglo” de Trump es “La Oportunidad del Siglo” que Israel no desperdiciará. La sala donde tuvo lugar la presentación estaba llena de sionistas, evangélicos y altos dignatarios de la Casa Blanca, pero ni un solo político, consejero u otro cargo palestino presente en ella, lo que demuestra una vez más la ilegitimidad de este supuesto “plan de paz”.
Entre los presentes estuvieron también los embajadores de Barein, Omán y los Emiratos Árabes Unidos, que costearán la parte económica del acuerdo. Estos países representan solamente el 1% de la población árabe, pero son aliados de Israel y las naciones de Occidente porque comparten un enemigo: Irán.
Durante sus tres años de mandato, Trump no ha hecho otra cosa que favores al Estado sionista, como trasladar la embajada de EE.UU a Jerusalén, decir que los Altos del Golán sirios pertenecen a Israel, y retirándose de forma unilateral del Tratado Nuclear con Irán.
La “Bofetada del Siglo”, como lo ha calificado el Presidente palestino Mahmoud Abbas, declara que el pueblo palestino tendría cuatro años para constituirse en Estado. Trump, en su discurso, pidió a los palestinos que superen los desafíos de una co-existencia pacífica, lo que significa que Hamas se desarme y acepte el carácter judío del Estado de Israel. A cambio, se otorgaría al pueblo palestino una autonomía limitada dentro de su tierra, consistente en múltiples enclaves no contiguos esparcidos por Gaza y Cisjordania. Israel retendría el control no sólo sobre estos enclaves, sino también sobre sus fronteras, espacio aéreo, acuíferos, aguas marítimas, y espectro electromagnético. Además, Israel podría anexionarse el valle del Jordán y las comunidades judías de Cisjordania. Los palestinos elegirían a sus representantes políticos, pero no tendrían ningún derecho político en Israel.
Este fraudulento “plan de paz” es, en definitiva, un apartheid que incrementa las tensiones entre las partes en conflicto.
La fecha que se ha elegido para dar a conocer este “Acuerdo del Siglo” es un dato importante, ya que tanto Trump como Netanyahu viven momentos difíciles dentro de sus Estados. El uno está siendo sometido a juicio en el Senado como parte del llamado “impeachment”; y el otro está acusado por el Fiscal General de Israel de varios casos de corrupción; de modo que la Farsa del Siglo les sirve a ambos como instrumento de distracción.
A mediados del siglo XX, en Sudáfrica, se designaron Estados casi-autónomos para la población negra, pero mantenidos bajo el control del Estado supremacista blanco. El “Robo del Siglo” aboca al pueblo palestino a una suerte muy similar.
Referencia:
http://infobrics.org/post/30266/
POR EVA LUGUNERO PARA CANARIAS SEMANAL.ORG.-
Algo de esto se filtró la primavera pasada, como informamos en Canarias Semanal. Esto, que se ha dado en llamar “El Acuerdo del Siglo”, ha visto por fin la luz pública en esta pasada semana. La ONU lo ha rechazado ya, reiterando que la resolución del conflicto palestino-israelí debe basarse en las resoluciones y leyes internacionales así como en los acuerdos bilaterales relativos a las demarcaciones anteriores a 1967.
Pero ya se sabe lo que les importa a Trump y su colega israelí, Benjamen Netanyahu, la legalidad internacional. El presidente de Estados Unidos ha puesto por delante su propio plan, que cuenta con la bendición de la AIPAC (American Israel Public Affairs Committe), corporación pro-israelí con enorme influencia en los poderes legislativo y ejecutivo de la gran potencia.
El que durante estos tres últimos años ha sido el principal consejero (y yerno) del Presidente Trump, el sionista Jared Kushner, ha sido el encargado de redactar el documento de ochenta páginas y el mapa que lo acompaña, el cual demuestra gráficamente cómo Israel usaría esta farsa de acuerdo para proseguir la ocupación ilegal y la anexión de la tierra palestina.
El conocimiento que Kushner posee sobre Oriente Medio se limita a las inversiones en proyectos inmobiliarios que tiene en Israel y a los veinticinco libros que ha consultado mientras preparaba su “acuerdo de paz”.
La “visión de paz, prosperidad y un futuro más brillante para israelíes y palestinos” de Trump, Kushner y Netanyahu contiene una agenda oculta que permitiría a Israel seguir subyugando y asesinando al pueblo palestino mientras ocupa y se anexiona su tierra.
Netanyahu ha dicho que su gabinete va a someter a votación el declarar los asentamientos de Cisjordania y el estratégico Valle del Jordán bajo soberanía de Israel. Ello representaría el 30 por ciento de Cisjordania, territorio ocupado que Israel robó a Jordania durante la guerra de 1967. Sin embargo, es posible que Netanyahu se tope con complicaciones legales dado que el actual gabinete es interino hasta que no se convoquen nuevas elecciones.
Trump y Kushner se mostraban pletóricos mientras daban a conocer su “Timo del Siglo” en la Casa Blanca. Netanyahu no podía refrenar su júbilo cuando dijo que "el Acuerdo del Siglo” de Trump es “La Oportunidad del Siglo” que Israel no desperdiciará. La sala donde tuvo lugar la presentación estaba llena de sionistas, evangélicos y altos dignatarios de la Casa Blanca, pero ni un solo político, consejero u otro cargo palestino presente en ella, lo que demuestra una vez más la ilegitimidad de este supuesto “plan de paz”.
Entre los presentes estuvieron también los embajadores de Barein, Omán y los Emiratos Árabes Unidos, que costearán la parte económica del acuerdo. Estos países representan solamente el 1% de la población árabe, pero son aliados de Israel y las naciones de Occidente porque comparten un enemigo: Irán.
Durante sus tres años de mandato, Trump no ha hecho otra cosa que favores al Estado sionista, como trasladar la embajada de EE.UU a Jerusalén, decir que los Altos del Golán sirios pertenecen a Israel, y retirándose de forma unilateral del Tratado Nuclear con Irán.
La “Bofetada del Siglo”, como lo ha calificado el Presidente palestino Mahmoud Abbas, declara que el pueblo palestino tendría cuatro años para constituirse en Estado. Trump, en su discurso, pidió a los palestinos que superen los desafíos de una co-existencia pacífica, lo que significa que Hamas se desarme y acepte el carácter judío del Estado de Israel. A cambio, se otorgaría al pueblo palestino una autonomía limitada dentro de su tierra, consistente en múltiples enclaves no contiguos esparcidos por Gaza y Cisjordania. Israel retendría el control no sólo sobre estos enclaves, sino también sobre sus fronteras, espacio aéreo, acuíferos, aguas marítimas, y espectro electromagnético. Además, Israel podría anexionarse el valle del Jordán y las comunidades judías de Cisjordania. Los palestinos elegirían a sus representantes políticos, pero no tendrían ningún derecho político en Israel.
Este fraudulento “plan de paz” es, en definitiva, un apartheid que incrementa las tensiones entre las partes en conflicto.
La fecha que se ha elegido para dar a conocer este “Acuerdo del Siglo” es un dato importante, ya que tanto Trump como Netanyahu viven momentos difíciles dentro de sus Estados. El uno está siendo sometido a juicio en el Senado como parte del llamado “impeachment”; y el otro está acusado por el Fiscal General de Israel de varios casos de corrupción; de modo que la Farsa del Siglo les sirve a ambos como instrumento de distracción.
A mediados del siglo XX, en Sudáfrica, se designaron Estados casi-autónomos para la población negra, pero mantenidos bajo el control del Estado supremacista blanco. El “Robo del Siglo” aboca al pueblo palestino a una suerte muy similar.
Referencia:
http://infobrics.org/post/30266/
Saburo | Martes, 04 de Febrero de 2020 a las 12:12:18 horas
Y por que no gasear a los palestinos actuales en Gaza y Cisjordania?? Quizás a los fascistas judios les arreglaría su problema,aunque no a la mayoría de los judíos que habitan el globo y, a buen seguro se averguenzan del gobierno del estado JUDIO DE ISRAEL, que así se hace llamar estos felones.
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