
CÓMO SE CAMUFLA EL IMPERIALISMO EN LAS NARRATIVAS CONTEMPORÁNEAS
Sobre el nuevo libro de Claudio Katz "La crisis imperial" ¿Es la sombra del Imperialismo Ineludible en la conformación de un nuevo Orden Mundial?
En el sinuoso y a veces tempestuoso mar de la geopolítica del siglo XXI, las reminiscencias de un imperialismo, astuto y a menudo encubierto, se cierne ominosamente sobre las naciones y sus gentes. A través de la aguda observación de Claudio Katz, somos conducidos a una exploración, tanto penetrante como provocativa (...)
REDACCIÓN CANARIAS SEMANAL.ORG
En la agitada coyuntura del siglo XXI, las sombras del imperialismo, fenómeno arraigado en la historia humana, vuelven a danzar sobre el panorama global, tejiendo un enredo de tensiones, conflictos y aparentes paradojas en el escenario internacional. La obra reciente de Claudio Katz, ofrece una lente reveladora para contemplar estas dinámicas, sus hilos visibles e invisibles, y sus actores, a veces transparentes y en otras, enigmáticamente opacos.
Sumérjase el lector por un instante en las frías aguas del Mar de China, donde las tensiones se yerguen como olas gigantes, anticipando posibles tormentas en el horizonte geopolítico. Simultáneamente, en el continente europeo, la guerra en Ucrania despliega su trágico telón, ofreciendo un presagio de los potenciales horrores emanados de las crecientes confrontaciones entre potencias mundiales.
Katz nos invita a viajar por estas realidades, no como meros espectadores, sino como analistas críticos, retomando el concepto de imperialismo, que ha sido suavizado, ignorado o simplemente camuflado en las narrativas contemporáneas, especialmente por aquellos que buscan mantener su hegemonía.
Recuérdese, por ejemplo, cómo en la era Bush, ciertos sectores, tanto neoconservadores como liberales, enaltecieron la invasión a Afganistán e Irak, adornando las acciones imperiales con matices de misión civilizatoria y justificación divina o internacional. Y aunque la idealización del imperialismo vaciló tras los fracasos en Bagdad y Kabul, las alabanzas y encubrimientos de la conducta imperial estadounidense han vuelto a resonar fuertemente, dejando traslucir las persistentes raíces del sistema imperial.
El argumento central de Katz se desarrolla en torno al "sistema imperial" y sus multifacéticas dimensiones - económica, política y geopolítica -, que de forma conjunta configuran un mecanismo de dominación global eficaz y tenaz. Este sistema no se limita a la gestión de la supremacía económica o a la perpetuación de ideologías que sustentan el status quo. Va más allá, garantizando la preservación del capitalismo a través de formidables resguardos militares.
La confusa narrativa global contemporánea, donde Estados Unidos se autopresenta como “protector de Occidente” y “custodio del orden mundial”, es disecada minuciosamente por Katz. Por un lado, la primera potencia mundial afirma sostener con firmeza las riendas del equilibrio internacional, mientras que por el otro, apunta el dedo acusador del imperialismo hacia las incursiones de sus adversarios. ¿Es acaso la proclamada misión de los marines estadounidenses en regiones periféricas, una cruzada por la civilización o un velo que oculta los verdaderos intentos de consolidar poder y acaparar recursos?
El sistema imperial, señala Katz, ha sido una estructura predominante desde la segunda mitad del siglo XX, y aunque ha evolucionado, manteniendo cierta distancia de sus predecesores clásicos, aún sostiene su pilar coercitivo: emplear la fuerza para resolver disputas, acumular ganancias y fortalecer poderes.
La conversación que Katz establece no es un monólogo unilateral sobre la malevolencia del imperialismo. Es un análisis robusto, que también destaca cómo las menciones de "imperialismo" en los círculos de elite oscilan entre la exaltación y el camuflaje, según convenga a sus propósitos. Esta perspicaz observación es crítica, por cuanto nos recuerda que la discusión sobre el imperialismo no es meramente histórica o académica, sino intensamente actual y relevantemente pragmática.
Finalmente, este libro no solo es un llamado a la reflexión, sino también un compendio de crítica y resistencia. Katz examina minuciosamente la conducta, las alianzas y las resistencias que se tejen en este sistema imperial, proporcionando al lector no solo una ventana al escenario mundial, sino también una invitación a participar activa y conscientemente en él.
Claudio Katz nos pone ante un espejo, cuyo reflejo va más allá de lo evidente, incitándonos a discernir entre la visión superficial de la geopolítica y las profundidades a veces turbulentas, a veces serenas, pero siempre complejas del Imperialismo en el siglo XXI.
REDACCIÓN CANARIAS SEMANAL.ORG
En la agitada coyuntura del siglo XXI, las sombras del imperialismo, fenómeno arraigado en la historia humana, vuelven a danzar sobre el panorama global, tejiendo un enredo de tensiones, conflictos y aparentes paradojas en el escenario internacional. La obra reciente de Claudio Katz, ofrece una lente reveladora para contemplar estas dinámicas, sus hilos visibles e invisibles, y sus actores, a veces transparentes y en otras, enigmáticamente opacos.
Sumérjase el lector por un instante en las frías aguas del Mar de China, donde las tensiones se yerguen como olas gigantes, anticipando posibles tormentas en el horizonte geopolítico. Simultáneamente, en el continente europeo, la guerra en Ucrania despliega su trágico telón, ofreciendo un presagio de los potenciales horrores emanados de las crecientes confrontaciones entre potencias mundiales.
Katz nos invita a viajar por estas realidades, no como meros espectadores, sino como analistas críticos, retomando el concepto de imperialismo, que ha sido suavizado, ignorado o simplemente camuflado en las narrativas contemporáneas, especialmente por aquellos que buscan mantener su hegemonía.
Recuérdese, por ejemplo, cómo en la era Bush, ciertos sectores, tanto neoconservadores como liberales, enaltecieron la invasión a Afganistán e Irak, adornando las acciones imperiales con matices de misión civilizatoria y justificación divina o internacional. Y aunque la idealización del imperialismo vaciló tras los fracasos en Bagdad y Kabul, las alabanzas y encubrimientos de la conducta imperial estadounidense han vuelto a resonar fuertemente, dejando traslucir las persistentes raíces del sistema imperial.
El argumento central de Katz se desarrolla en torno al "sistema imperial" y sus multifacéticas dimensiones - económica, política y geopolítica -, que de forma conjunta configuran un mecanismo de dominación global eficaz y tenaz. Este sistema no se limita a la gestión de la supremacía económica o a la perpetuación de ideologías que sustentan el status quo. Va más allá, garantizando la preservación del capitalismo a través de formidables resguardos militares.
La confusa narrativa global contemporánea, donde Estados Unidos se autopresenta como “protector de Occidente” y “custodio del orden mundial”, es disecada minuciosamente por Katz. Por un lado, la primera potencia mundial afirma sostener con firmeza las riendas del equilibrio internacional, mientras que por el otro, apunta el dedo acusador del imperialismo hacia las incursiones de sus adversarios. ¿Es acaso la proclamada misión de los marines estadounidenses en regiones periféricas, una cruzada por la civilización o un velo que oculta los verdaderos intentos de consolidar poder y acaparar recursos?
El sistema imperial, señala Katz, ha sido una estructura predominante desde la segunda mitad del siglo XX, y aunque ha evolucionado, manteniendo cierta distancia de sus predecesores clásicos, aún sostiene su pilar coercitivo: emplear la fuerza para resolver disputas, acumular ganancias y fortalecer poderes.
La conversación que Katz establece no es un monólogo unilateral sobre la malevolencia del imperialismo. Es un análisis robusto, que también destaca cómo las menciones de "imperialismo" en los círculos de elite oscilan entre la exaltación y el camuflaje, según convenga a sus propósitos. Esta perspicaz observación es crítica, por cuanto nos recuerda que la discusión sobre el imperialismo no es meramente histórica o académica, sino intensamente actual y relevantemente pragmática.
Finalmente, este libro no solo es un llamado a la reflexión, sino también un compendio de crítica y resistencia. Katz examina minuciosamente la conducta, las alianzas y las resistencias que se tejen en este sistema imperial, proporcionando al lector no solo una ventana al escenario mundial, sino también una invitación a participar activa y conscientemente en él.
Claudio Katz nos pone ante un espejo, cuyo reflejo va más allá de lo evidente, incitándonos a discernir entre la visión superficial de la geopolítica y las profundidades a veces turbulentas, a veces serenas, pero siempre complejas del Imperialismo en el siglo XXI.
luigi45 | Miércoles, 04 de Octubre de 2023 a las 10:23:06 horas
Katz, como siempre, confundiendo y desinformando.
En resumen haciendo el trabajo sucio de la OTAN tratando a Rusia de país imperialista.
Sólo tenéis que visitar su página y sumar dos y dos en los artículos que habla de Rusia o China, más o menos como las tonterías que escribe el Quesada ese.
La deriva de CS respecto a este tema empieza a ser vomitiva
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