
ENTREVISTA: EL PRIOR DEL VALLE DE LOS CAÍDOS LAMENTA QUE GARCÍA LORCA NO ESTÉ JUNTO AL "CAUDILLO"
"¡Quienes trabajaron en el Valle de los Caídos no eran esclavo, Lo hicieron voluntariamente!", alega este monje tridentino.
El prior del Valle de los Caídos no es un prior cualquiera. Es un hombre de fuertes convicciones ultraderechistas, que cursó la carrera de Historia, especializándose en historia medieval . Ha escrito la friolera de 17 libros. Claro que la mayoría de ellos sobre temas tan sugestivos como la cristianización de Europa, biografías de los mártires de la "Cruzada", etc. A principios de la década de los 90 del pasado siglo se presentó como candidato en las listas del partido "Falange Española". Se opone aguerridamente a que los restos del dictador más cruento de la historia de España, sean sacados del mausoleo dedicado a su memoria.
REDACCIÓN CANARIAS SEMANAL
El prior del Valle de los Caídos no es un prior cualquiera. Es un hombre de fuertes convicciones ultraderechistas que, además, cursó la carrera de Historia en la Universidad Complutense de Madrid. Como corresponde a sus convicciones, se especializó en Historia Medieval.
Ha escrito la friolera de 17 libros, la mayoría de ellos relacionados con la cristianización de Europa, la crisis de Occidente, o biografías de "mártires de la Cruzada", o sea, de insurrectos joseantonianos y fascistas que participaron en el golpe militar de julio de 1936, que dio lugar a la cruenta Guerra Civil española.
Como será fácil deducir, de las preocupaciones del Prior Santiago Cantera no ha estado ausente la actividad política. Ello le llevó a presentarse a principios de la década de los 90 a dos convocatorias electorales ambas, naturalmente, por las listas del partido fascista Falange Española.
En un momento dado, explica con orgullo el aguerrido Prior, sintió la "llamada de Dios", y ella le llevó a ingresar en la Abadía de la que hoy es prior. ¿Qué mejor lugar que el mausoleo a Franco para ver cumplimentadas sus convicciones político religiosas?
Hace cinco años, la renuncia del antiguo Abad del Valle de los Caídos, Anselmo Álvarez, un hombre también de arraigadas convicciones franquistas, le abrió la oportunidad de dirigir el mausoleo, aunque no, desgraciadamente, con la categoría de "Abad" , sino de "prior" , ya que su candidatura estuvo sometido a fuertes tensiones internas.
Pero aún así, con ese nombramiento de inferior categoría, Santiago Cantera se ha convertido en un sólido mascarón de proa del monumental edificio, repleto de "esencias patrias".
En un discurso que ni posiblemente él mismo se crea, Cantera alega que
“Me gusta el nombre de Valle de los Caídos porque en él reposan los restos de casi 34.000 caídos de ambos bandos en la guerra según el registro. Pero los que cayeron enfrentados están hermanados hoy aquí de cara a la eternidad”,
Cada 20 de noviembre, fecha en la que se desapareció físicamente el dictador en 1975, el prior Cantera y sus ayudantes ofician múltiples misas en recuerdo de Franco y del "ausente" Jose Antonio Primo de Rivera, procediéndose un engalanamiento pomposo de la tumba del dictador. Por si ello fuera poco, el prior Cantera llegó a oficiar, incluso, la misa por muerte de Carmen Franco, la hija del dictador, en diciembre de 2017.
El pasado 20 de noviembre, el famoso 20N, este irremediable fascista volvió a reiterar públicamente con rotundidad su oposición guerrera a la idea del Gobierno de sacar a Franco del Valle, argumentando que la tradición cristiana estima que los cuerpos de los difuntos deben de gozar de "dignidad y respeto" para que "reposen en paz", aunque estos sean criminales genocidas que estuvieron asesinando hasta los últimos días de sus vidas.
Quizá esa fue la razón por la que la revista argentina Página 12, quiso conocer las peculiaridades psiquis de un sujeto tan sui generis como Santiago Cantera, y a través de David Serrano Blanquer procedió a entrevistarlo. Esta es la entrevista íntegra del prior y teórico falangista, hoy fiel custodio de los restos del dictador más cruento de la historia de España.
ENTREVISTA:
–¿Cuántos monjes forman la comunidad?
Unos 23, porque hay uno que está trabajando en Roma, en la Congregación de las Causas de los Santos, y otros en formación.
–El orden de los benedictinos es quien dirige la parte religiosa del Valle. ¿Cómo funciona la adscripción a una comunidad?
La vocación va ligada a la estabilidad, que se vincula siempre a una comunidad concreta.
–¿Cómo escogió usted esta comunidad?
A los 30 años escuché la llamada a la vida monástica, dejé las clases en la Universidad San Pablo CEU, y me planteé distintas órdenes monacales. Probé con los cartujos y al final me decidí por el Valle.
–He visitado la basílica, escuché la homilía, y no entiendo el encaje entre el espíritu de “reconciliación” que ha reclamado hasta en seis ocasiones, y una simbología e iconografías donde no se percibe por ningún lugar este supuesto espíritu…
Si lo dices por los arcángeles de la entrada, recuerdan los ángeles del Paraíso, del Génesis…
–No me refería solo a la iconografía, pero ya que lo dice, tienen más de cinco metros de altura, empuñan una enorme espada y tienen unas facciones muy agresivas…
Dios los puso allí para que impidieran el paso al Paraíso a Adán y Eva…
–En cuanto a las figuras del enorme paso central, con las caras inclinadas bajo capuchas, no me negará favorecen una actitud de temor.
Representan a los combatientes y caídos de tierra, mar y aire, que piden silencio por el hecho de entrar en un lugar sagrado que es el cementerio…
–No veo que el escultor Juan Ávalos propusiera ninguna actitud conciliadora sino más bien represiva.
Es la estética de ese momento, del triunfalismo, en consonancia con el arte de estas magnitudes.
–¿En consonancia con qué estilo, el fascista que ya había sucumbido en Europa?
Un cierto neoclasicismo que puede recordar a la Italia fascista, sí, pero en cambio el conjunto escultural de la Virgen del Valle, de Ramón Lapayese, tiene unos aires más de ruptura. Y la cúpula tiene un aire entre bizantino y romántico.
–No sé… lo que es clarísimo es que está la bandera de la Falange y las tumbas de Franco y Primo de Rivera en primer plano.
Parece que en el momento de traer a Primo de Rivera se hicieron gestiones con la familia de Federico García Lorca para que también fuera llevada aquí, pero parece que no fructificaron. Ciertamente que los dos que hay aquí son los que hay. En todo caso, nuestro trabajo es desde la voluntad reconciliadora.
–Aquí no hay ninguna lectura plural, ni mención alguna del lugar donde fueron enterrados con nocturnidad y sin permiso algunos de los republicanos que lucharon contra los fascistas.
El conjunto monumental tiene y tendrá unas connotaciones innegables e inevitables.
– No percibo esfuerzo alguno por resignificar lo que tiene una sola lectura.
Entiendo que haya quien se pueda sentir incómodo, pero aquí viene gente de todo tipo.
–Si se buscara esta “reconciliación” haría falta desplazar de su lugar de privilegio a Franco y Primo de Rivera para permitir una lectura democrática del recinto, como concluyó la Comisión de Expertos hace años, y como pretende el gobierno.
Tocar un monumento con un significado histórico y artístico determinados… Por ejemplo ¿crees que tendríamos que desplazar Enrique IV de su lugar en el Monasterio de Guadalupe por el hecho de que caía mal a mucha gente?
–Nada tiene que ver caer bien o mal cuando hablamos de un dictador que ejerció una de las represiones más brutales del siglo.
Mira, todo esto estaba bastante calmado hasta hace poco. Muchas de las cosas de hace 70-80 años de la guerra y 43 de la muerte de Franco ya estaban superadas. ¿Ahora hay que pensar en mover a Franco? No es lo que quiere la comunidad y en todo caso Primo de Rivera tiene todo el derecho de estar aquí.
–Según esta lógica, los republicanos enterrados sin el consentimiento de sus familias en las capillas laterales también tendrán el derecho de decidir dónde quieren a sus muertos, ¿no? Porque hasta ahora ustedes se han negado sistemáticamente
Todo se ha revuelto mucho en los últimos tiempos por finalidades políticas en las cuales no quiero entrar, y yo creo que el tiempo lo calma todo. Hay muchos intereses políticos, que sufrimos la comunidad. Puedo llegar a entenderlo… pero, a ver, el tema de las exhumaciones es complicado porque se mezclan los restos de los que están identificados con los que no lo están…Yo creo que se han reabierto muchas heridas.
–No sé si es reabrir una herida algo tan sencillo como que centenares de miles de familiares puedan saber después de 70 años dónde llorar a sus seres queridos asesinados en cunetas o fosas.
Eso sí… pero ahora se ha dado la vuelta a la tortilla, puede que antes solo se hiciera memoria de una parte y puede que ahora más de la otra…
–¿Será porque la memoria democrática no se había podido hacer hasta hace poco y solo había un relato oficial, el fascista?
No se había hecho, no… Pero se han crispado mucho los ánimos y ahora esta crispación aún puede aumentar mucho más. ¡Lo que es cierto es que durante la posguerra se había conseguido vencer la crispación! Claro, porque las tensiones sociales y laborales y las injusticias sociales llevan siempre a crispaciones como las de ahora.
–Ahora estamos en democracia y antes no, y el modo de resolver conflictos no tiene nada que ver con el modo de hacerlo de un estado totalitario.
En teoría, según algunos, el año 1931 (cuando se proclama la República) llegó la democracia. Pero otra cosa es que fuera real o no…
–Usted es doctor en Historia, no puede decir esto… ¿Me negará que de 1939 a 1975 hubo una dictadura?
Yo lo que quiero decir, sin entrar en consideraciones políticas, es que un estallido social puede producirse bajo cualquier régimen. Lo que puede garantizar que no estalle una guerra no es tanto un régimen político como mayor nivel de igualdad social.
–No respondió mi pregunta. Y además vuelve a hacer lo que niega: valoraciones políticas.
Ahora puede que sí que haya hecho una valoración política.
–Hubo 180.000 asesinados. Según su colega Paul Preston, solo hubo más desaparecidos en Camboya.
No haré valoraciones políticas… porque en democracia la policía también actúa.
–Aquí hubo cerca de 2000 presos republicanos trabajando en la construcción del complejo. Y usted sabe mejor que nadie que aquí murieron unos cuantos.
No eran esclavos, ¡no era un campo nazi esto!
–No dije eso, sé lo que eran los campos nazis perfectamente. Pero las condiciones…
¡Aquí venían voluntariamente!
–¿Qué, les ofrecían trabajo y cuando terminaban la jornada se iban a sus casas a cenar y dormir con sus familias?
¡No hombre, no! ¡Estaban condenados!
–¿Su delito era ser republicanos?
La cuestión es que aquí comían cerdo cuando nadie podía comerlo y redimían las penas con el trabajo bien pagado que tenían…
–Eso no es lo que dicen los sobrevivientes ni los estudios rigurosos. En la homilía se dijo que el verdadero camino se encuentra “por encima de las leyes y los partidos políticos”. ¿No cree que este mensaje no tiene nada de democrático ni de cristiano?
Efectivamente yo creo que el único mensaje, por encima de todo, es el de Jesucristo en la Cruz. Yo nunca pondré la esperanza ni en un político, ni en un economista, ni en un sistema político.
REDACCIÓN CANARIAS SEMANAL
El prior del Valle de los Caídos no es un prior cualquiera. Es un hombre de fuertes convicciones ultraderechistas que, además, cursó la carrera de Historia en la Universidad Complutense de Madrid. Como corresponde a sus convicciones, se especializó en Historia Medieval.
Ha escrito la friolera de 17 libros, la mayoría de ellos relacionados con la cristianización de Europa, la crisis de Occidente, o biografías de "mártires de la Cruzada", o sea, de insurrectos joseantonianos y fascistas que participaron en el golpe militar de julio de 1936, que dio lugar a la cruenta Guerra Civil española.
Como será fácil deducir, de las preocupaciones del Prior Santiago Cantera no ha estado ausente la actividad política. Ello le llevó a presentarse a principios de la década de los 90 a dos convocatorias electorales ambas, naturalmente, por las listas del partido fascista Falange Española.
En un momento dado, explica con orgullo el aguerrido Prior, sintió la "llamada de Dios", y ella le llevó a ingresar en la Abadía de la que hoy es prior. ¿Qué mejor lugar que el mausoleo a Franco para ver cumplimentadas sus convicciones político religiosas?
Hace cinco años, la renuncia del antiguo Abad del Valle de los Caídos, Anselmo Álvarez, un hombre también de arraigadas convicciones franquistas, le abrió la oportunidad de dirigir el mausoleo, aunque no, desgraciadamente, con la categoría de "Abad" , sino de "prior" , ya que su candidatura estuvo sometido a fuertes tensiones internas.
Pero aún así, con ese nombramiento de inferior categoría, Santiago Cantera se ha convertido en un sólido mascarón de proa del monumental edificio, repleto de "esencias patrias".
En un discurso que ni posiblemente él mismo se crea, Cantera alega que
“Me gusta el nombre de Valle de los Caídos porque en él reposan los restos de casi 34.000 caídos de ambos bandos en la guerra según el registro. Pero los que cayeron enfrentados están hermanados hoy aquí de cara a la eternidad”,
Cada 20 de noviembre, fecha en la que se desapareció físicamente el dictador en 1975, el prior Cantera y sus ayudantes ofician múltiples misas en recuerdo de Franco y del "ausente" Jose Antonio Primo de Rivera, procediéndose un engalanamiento pomposo de la tumba del dictador. Por si ello fuera poco, el prior Cantera llegó a oficiar, incluso, la misa por muerte de Carmen Franco, la hija del dictador, en diciembre de 2017.
El pasado 20 de noviembre, el famoso 20N, este irremediable fascista volvió a reiterar públicamente con rotundidad su oposición guerrera a la idea del Gobierno de sacar a Franco del Valle, argumentando que la tradición cristiana estima que los cuerpos de los difuntos deben de gozar de "dignidad y respeto" para que "reposen en paz", aunque estos sean criminales genocidas que estuvieron asesinando hasta los últimos días de sus vidas.
Quizá esa fue la razón por la que la revista argentina Página 12, quiso conocer las peculiaridades psiquis de un sujeto tan sui generis como Santiago Cantera, y a través de David Serrano Blanquer procedió a entrevistarlo. Esta es la entrevista íntegra del prior y teórico falangista, hoy fiel custodio de los restos del dictador más cruento de la historia de España.
ENTREVISTA:
–¿Cuántos monjes forman la comunidad?
Unos 23, porque hay uno que está trabajando en Roma, en la Congregación de las Causas de los Santos, y otros en formación.
–El orden de los benedictinos es quien dirige la parte religiosa del Valle. ¿Cómo funciona la adscripción a una comunidad?
La vocación va ligada a la estabilidad, que se vincula siempre a una comunidad concreta.
–¿Cómo escogió usted esta comunidad?
A los 30 años escuché la llamada a la vida monástica, dejé las clases en la Universidad San Pablo CEU, y me planteé distintas órdenes monacales. Probé con los cartujos y al final me decidí por el Valle.
–He visitado la basílica, escuché la homilía, y no entiendo el encaje entre el espíritu de “reconciliación” que ha reclamado hasta en seis ocasiones, y una simbología e iconografías donde no se percibe por ningún lugar este supuesto espíritu…
Si lo dices por los arcángeles de la entrada, recuerdan los ángeles del Paraíso, del Génesis…
–No me refería solo a la iconografía, pero ya que lo dice, tienen más de cinco metros de altura, empuñan una enorme espada y tienen unas facciones muy agresivas…
Dios los puso allí para que impidieran el paso al Paraíso a Adán y Eva…
–En cuanto a las figuras del enorme paso central, con las caras inclinadas bajo capuchas, no me negará favorecen una actitud de temor.
Representan a los combatientes y caídos de tierra, mar y aire, que piden silencio por el hecho de entrar en un lugar sagrado que es el cementerio…
–No veo que el escultor Juan Ávalos propusiera ninguna actitud conciliadora sino más bien represiva.
Es la estética de ese momento, del triunfalismo, en consonancia con el arte de estas magnitudes.
–¿En consonancia con qué estilo, el fascista que ya había sucumbido en Europa?
Un cierto neoclasicismo que puede recordar a la Italia fascista, sí, pero en cambio el conjunto escultural de la Virgen del Valle, de Ramón Lapayese, tiene unos aires más de ruptura. Y la cúpula tiene un aire entre bizantino y romántico.
–No sé… lo que es clarísimo es que está la bandera de la Falange y las tumbas de Franco y Primo de Rivera en primer plano.
Parece que en el momento de traer a Primo de Rivera se hicieron gestiones con la familia de Federico García Lorca para que también fuera llevada aquí, pero parece que no fructificaron. Ciertamente que los dos que hay aquí son los que hay. En todo caso, nuestro trabajo es desde la voluntad reconciliadora.
–Aquí no hay ninguna lectura plural, ni mención alguna del lugar donde fueron enterrados con nocturnidad y sin permiso algunos de los republicanos que lucharon contra los fascistas.
El conjunto monumental tiene y tendrá unas connotaciones innegables e inevitables.
– No percibo esfuerzo alguno por resignificar lo que tiene una sola lectura.
Entiendo que haya quien se pueda sentir incómodo, pero aquí viene gente de todo tipo.
–Si se buscara esta “reconciliación” haría falta desplazar de su lugar de privilegio a Franco y Primo de Rivera para permitir una lectura democrática del recinto, como concluyó la Comisión de Expertos hace años, y como pretende el gobierno.
Tocar un monumento con un significado histórico y artístico determinados… Por ejemplo ¿crees que tendríamos que desplazar Enrique IV de su lugar en el Monasterio de Guadalupe por el hecho de que caía mal a mucha gente?
–Nada tiene que ver caer bien o mal cuando hablamos de un dictador que ejerció una de las represiones más brutales del siglo.
Mira, todo esto estaba bastante calmado hasta hace poco. Muchas de las cosas de hace 70-80 años de la guerra y 43 de la muerte de Franco ya estaban superadas. ¿Ahora hay que pensar en mover a Franco? No es lo que quiere la comunidad y en todo caso Primo de Rivera tiene todo el derecho de estar aquí.
–Según esta lógica, los republicanos enterrados sin el consentimiento de sus familias en las capillas laterales también tendrán el derecho de decidir dónde quieren a sus muertos, ¿no? Porque hasta ahora ustedes se han negado sistemáticamente
Todo se ha revuelto mucho en los últimos tiempos por finalidades políticas en las cuales no quiero entrar, y yo creo que el tiempo lo calma todo. Hay muchos intereses políticos, que sufrimos la comunidad. Puedo llegar a entenderlo… pero, a ver, el tema de las exhumaciones es complicado porque se mezclan los restos de los que están identificados con los que no lo están…Yo creo que se han reabierto muchas heridas.
–No sé si es reabrir una herida algo tan sencillo como que centenares de miles de familiares puedan saber después de 70 años dónde llorar a sus seres queridos asesinados en cunetas o fosas.
Eso sí… pero ahora se ha dado la vuelta a la tortilla, puede que antes solo se hiciera memoria de una parte y puede que ahora más de la otra…
–¿Será porque la memoria democrática no se había podido hacer hasta hace poco y solo había un relato oficial, el fascista?
No se había hecho, no… Pero se han crispado mucho los ánimos y ahora esta crispación aún puede aumentar mucho más. ¡Lo que es cierto es que durante la posguerra se había conseguido vencer la crispación! Claro, porque las tensiones sociales y laborales y las injusticias sociales llevan siempre a crispaciones como las de ahora.
–Ahora estamos en democracia y antes no, y el modo de resolver conflictos no tiene nada que ver con el modo de hacerlo de un estado totalitario.
En teoría, según algunos, el año 1931 (cuando se proclama la República) llegó la democracia. Pero otra cosa es que fuera real o no…
–Usted es doctor en Historia, no puede decir esto… ¿Me negará que de 1939 a 1975 hubo una dictadura?
Yo lo que quiero decir, sin entrar en consideraciones políticas, es que un estallido social puede producirse bajo cualquier régimen. Lo que puede garantizar que no estalle una guerra no es tanto un régimen político como mayor nivel de igualdad social.
–No respondió mi pregunta. Y además vuelve a hacer lo que niega: valoraciones políticas.
Ahora puede que sí que haya hecho una valoración política.
–Hubo 180.000 asesinados. Según su colega Paul Preston, solo hubo más desaparecidos en Camboya.
No haré valoraciones políticas… porque en democracia la policía también actúa.
–Aquí hubo cerca de 2000 presos republicanos trabajando en la construcción del complejo. Y usted sabe mejor que nadie que aquí murieron unos cuantos.
No eran esclavos, ¡no era un campo nazi esto!
–No dije eso, sé lo que eran los campos nazis perfectamente. Pero las condiciones…
¡Aquí venían voluntariamente!
–¿Qué, les ofrecían trabajo y cuando terminaban la jornada se iban a sus casas a cenar y dormir con sus familias?
¡No hombre, no! ¡Estaban condenados!
–¿Su delito era ser republicanos?
La cuestión es que aquí comían cerdo cuando nadie podía comerlo y redimían las penas con el trabajo bien pagado que tenían…
–Eso no es lo que dicen los sobrevivientes ni los estudios rigurosos. En la homilía se dijo que el verdadero camino se encuentra “por encima de las leyes y los partidos políticos”. ¿No cree que este mensaje no tiene nada de democrático ni de cristiano?
Efectivamente yo creo que el único mensaje, por encima de todo, es el de Jesucristo en la Cruz. Yo nunca pondré la esperanza ni en un político, ni en un economista, ni en un sistema político.
Gustavo | Jueves, 27 de Junio de 2019 a las 00:32:00 horas
Con el prior del Valle y el escrito del exteniente Gonzalo se prueba una vez mas que la democracia de la monarquia parlamentaria, es una estafa a la ciudadania. Pregunto a los dirigentes politicos aguados ingenuos: ¿Cuando se depuro el gobierno militar fratricida del gral. ferrolano, que finalizada la guerra civil en 1939 continuo el expurgo con "enterados" a los vencidos republicanos? ¿El gobierno del ex rey Juan Carlos ha pedido excusas por los fallecidos en los años de la dolorosa transicion? Él tenia capacidad de decision en los Consejos de ministros, por las leyes del Regimen anterior que no habian sido anulados.
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