Sábado, 11 de Octubre de 2025

Actualizada

Viernes, 10 de Octubre de 2025 a las 17:23:24 horas

| 759
Domingo, 06 de Febrero de 2022 Tiempo de lectura:

CARLOS SANTISO, EL ENTRENADOR QUE INCITA A LA VIOLACIÓN EN MANADA Y PROTEGE EL PRESIDENTE DEL RAYO VALLECANO (VÍDEO)

Al presidente del Rayo Vallecano la misoginia le sale por los poros, como al entrenador que ha fichado para el equipo B femenino.

En esta semana pasada ha salido a la luz pública el escándalo que han suscitado las declaraciones machistas de Carlos Santiso, recién nombrado entrenador del equipo B de fútbol femenino del Rayo Vallecano (Madrid); declaraciones realizadas hace cuatro años por WhatsApp a sus compañeros técnicos, cuyo calificativo de muy graves está justificado porque alienta a violar en grupo a una mujer.

 

 

   Por TITA BARAHONA PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-

 

 

   Hace cuatro años, Carlos Santiso, entrenador de fútbol, en nómina del club Rayo Vallecano, hizo el siguiente comentario en un grupo de WhatsApp, cuyo audio se filtró el pasado 25 de noviembre, Día Mundial contra la Violencia de Género:

 

 

   “¡Qué pasa, equipo! Dos cosas: espectacular la primera parte […] y luego la otra es que este staff, Álvaro, estoy contigo en que es increíble pero nos faltan cosas, nos falta, sigo diciéndolo, hacer una pues como los de la Arandina [1], tío; nos falta ir y que cojamos a una, pero que sea mayor de edad para no meternos en jaris, y cargárnosla ahí todos juntos. Eso es lo que une realmente a un staff y a un equipo. Mira a los del Arandina, iban directos al ascenso. Venga chavales, buen domingo”.

 

 

   Como dije en otro lugar, en la violación – lo que Santiso llama “cargárnosla”- o en cualquier otra forma de violencia contra las mujeres, tan culpables son quienes cometen esos delitos, como quienes los alientan, jalean y justifican.

 

 

   Ese club de cómplices de los delincuentes machistas, sub-especie que no merece más catalagocación que la de machos, es, por desgracia, muy nutrido.

 

 

   Uno de ellos es el propio presidente del Rayo Vallecano, Raúl Martín Presa, amigo del ultraderechista Santiago Abascal (Vox). Conociendo los antecedentes del técnico de su plantilla, lo fichó como entrenador nada menos que del equipo B de fútbol femenino del club, en un acto que más parece un ejercicio de recochineo.

 

[Img #70459]

 

 

   Lógicamente, la publicación del audio de Santiso ha suscitado bastante indignación pública e incluso de las instituciones deportivas. El Consejo Superior de Deportes ha dicho que el club debe

 

explicar a su afición y a la sociedad por qué procede con una contratación que sonroja, que nadie entiende y que, desde luego, es lo último que merecen nuestras mujeres futbolistas”.

 

 

   El Departamento de Integridad de la Federación Española de Fútbol ha considerado el caso lo suficientemente grave como para trasladarlo al Comité de Ética, que está elaborando un informe.

 

 

   El sindicato de mujeres futbolistas FUTPRO ha anunciado que está trabajando en medidas efectivas que impidan que el Rayo Vallecano disponga de un entrenador con los precedentes de Carlos Santiso. La AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) también ha sacado un comunicado en el que asegura que los comentarios de Santiso son reprobables y no se pueden tolerar.

 

 

   La propia plantilla de mujeres del equipo B, tras un -comprensible- silencio inicial, se ha pronunciado mediante otro comunicado publicado en la página web de la Asociación de Futbolistas:

 

 

   “Reprobamos y rechazamos estas declaraciones por ser contrarias a la dignidad de las mujeres y que son de una gravedad que no es aceptable en ningún caso. Como trabajadoras y profesionales del fútbol vamos a ser beligerantes contra expresiones de esta índole. Queremos dejar claro que si estas palabras hubieran correspondido a unos hechos, nosotras lo hubiéramos denunciado de forma inmediata ante la autoridad judicial”.

 

 

   El 29 de enero, en la ciudad deportiva, los aficionados colgaron una pancarta que ponía: “Por respeto a la mujer, Santiso fuera de VK [Vallekas]”, entre otras que han aparecido en estos días, incluidos los carteles de una aficionada del Rayo que fue entrevistada por Radio Madrid. La grabación de sus declaraciones ha tenido una difusión masiva en redes sociales, porque esta mujer ha dado voz a lo que sentimos multitud de personas.

 

 

   La petición para que se cese a Santiso como entrenador del equipo femenino B es unánime, y a las reacciones se ha sumado la decisión de Jorge Blanco, preparador físico de dicho equipo, de cesar por un tiempo en sus funciones, “ya que por principios y valores no puedo estar en la misma institución que ciertas personas”.

 

 

   Pero el presidente, Martín Presa, se resiste. En declaraciones a la Cadena Ser dijo que ficha “a profesionales y no a personas, que no va a “entrar en polémicas ni hacer caso a ninguna presión mediática para echar al entrenador. Incluso, el pasado 2 de febrero, prohibió la entrada en el estadio de Vallecas con emblemas a la hinchada antifascista de los Bukaneros.

 

 

   La misoginia del presidente del Rayo Vallecano queda patente en el modo denigrante en que trata a las mujeres deportistas, con las que ya ha tenido varios enfrentamientos, uno de ellos cuando intentaron que las diera de alta en la Seguridad Social. Pero no es la única afrenta. El presidente no las deja aparcar dentro de la ciudad deportiva, como hace la plantilla del equipo masculino; no las dota de gimnasio ni de servicios médicos y les da de comer pésimamente.

 

 

   En medio del clamor por el cese de Carlos Santiso, el martes pasado el club publicó un comunicado en el que él mismo explica que no había hablado antes “por no tener la fuerza física y mental debido a la magnitud de lo sucedido.

 

 

   En este comunicado, Santiso pide perdón y asegura arrepentirse de la “broma desafortunada, machista, imperdonable y muy de mal gusto”. Se escuda en que no tiene antecedentes penales y que lleva 15 años trabajando “de manera intachable” en la formación de jóvenes futbolistas (fue entrenador del equipo sub-12). Y prosigue:

 

 

   “Esta actitud de perdón y comprensión que ha mostrado el Rayo Vallecano está impidiendo que me derrumbe y se me destruya como ser humano pese a toda la corriente mediática que está empujando en este sentido por una acción impresentable que tuve hace cuatro años”.

 

 

   A la apología de la violación en manada, Santiso lo llama “broma-cuando es, en realidad, una declaración de intenciones-. Bien calificada de machista, sin duda, y de imperdonable. Nosotras, en efecto, no olvidamos ni perdonamos; por eso, la que esto subscribe también exige su cese inmediato, al menos como entrenador del equipo femenino cuya vocación y entrega al deporte futbolístico tiene, al parecer, que pasar por todo tipo de humillaciones, precisamente por ser mujeres.

 

 

   El apoyo del club, dice Santiso -aunque más bien de su presidente- ha impedido que “se derrumbe y destruya como ser humano”, lo que, según él, pasaría si lo cesaran.

 

 

   El señor Santiso nos recuerda su condición humana y la destrucción que le causaría su cese, cuando lo que se destila de su “broma” es que no le importa en absoluto que se destruyan las vidas y la dignidad de las mujeres, a las que no parece considerar seres humanos, sino simples objetos que se pueden asaltar y “cargar” en grupo sin ningún escrúpulo, para “unir realmente a un equipo” -o, más bien, a una jauría.

 

   Por declaraciones y hechos mucho menos graves hay personas sancionadas y/o cumpliendo condena de cárcel. Claro que, en España, la violencia o su apología son delito dependiendo de quién la cometa y a quién se dirija. No ha lugar a ejemplos concretos porque llenaríamos páginas.

 

 

   La ministra de Igualdad, Irene Montero, no ha hecho todavía ninguna declaración sobre este caso, quizás porque la apología de la violación no se dirige explícitamente a ningún miembro del colectivo LGTBQ+ -lo cual sería igualmente condenable-, sino a las mujeres y niñas, cuyos derechos y dignidad son, al parecer, los últimos a proteger.

 

 

   [1] "Los de la Arandina” son los tres futbolistas que en noviembre de 2017 invitaron a una niña de 15 años a su casa y la agredieron sexualmente. La Fiscalía pidió de 39 a 40 años de cárcel, la Audiencia Provincial de Burgos les condenó en diciembre de 2019 a 38 por “agresión sexual”. Tres meses después, la Sala Civil-Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León absolvió a uno de ellos y rebajó las penas a cuatro y tres años a los otros dos al considerar que el delito cometido fue de abusos.

 

 

VÍDEO:

 

 

 

 

 

 

Comentarios Comentar esta noticia
Comentar esta noticia

Normas de participación

Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.

Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.

La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad

Normas de Participación

Política de privacidad

Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.185

Todavía no hay comentarios

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.