EL KREMLIN Y TRUMP: ¿CONSENSO GEOESTRATÉGICO?
Rusia elogia la estrategia de seguridad de EE.UU. y descoloca al tablero global
¿Qué motiva al Kremlin a respaldar abiertamente la estrategia de seguridad de su rival histórico? ¿Podría esta coincidencia ser el reflejo de un cambio en la arquitectura del poder global? El elogio ruso a la política de seguridad estadounidense firmada por Trump, plantea interrogantes sobre el rumbo geopolítico de ambas potencias.
POR MARTÍN ÁLVAREZ PARA CANARIAS SEMANAL.ORG
Según la Agencia de noticias Reuters, en una información titulada “El Kremlin afirma que la nueva estrategia de
seguridad de EE.UU. coincide en gran medida con la visión de Rusia” se ha presentado una valoración inusualmente positiva por parte del gobierno ruso hacia un documento estratégico elaborado por el antiguo rival geopolítico de Moscú, Estados Unidos.
Según los autores de la información, el Kremlin saludó con optimismo la nueva Estrategia de Seguridad Nacional presentada por Donald Trump, calificando su contenido como “coincidente en muchos aspectos con la perspectiva rusa".
Esta afirmación, realizada por el portavoz del Kremlin Dmitry Peskov, representa una ruptura con la retórica habitualmente dominante entre ambas potencias, tradicionalmente marcada por desconfianza y rivalidad abierta.
![[Img #88471]](https://canarias-semanal.org/upload/images/12_2025/997_diny.jpg)
El artículo resalta cómo la estrategia estadounidense, bajo el lema del “realismo flexible”, incluye elementos como la recuperación de la Doctrina Monroe del siglo XIX —que considera al hemisferio occidental bajo influencia directa de Washington— y señala a Europa como una región que enfrenta un “borramiento de la civilización”.
Además, el texto establece que la resolución del conflicto en Ucrania tiene un interés “central” para EE.UU., y manifiesta la voluntad de restablecer la estabilidad estratégica con Rusia.
De acuerdo con lo expresado por Reuters, este reconocimiento explícito por parte del Kremlin representa un giro llamativo, especialmente si se considera que durante décadas Moscú y Washington se enzarzaron en una narrativa ideológica hostil.
Durante la llamada Guerra Fría, Estados Unidos - expresa Reuters- definía a la URSS como un “imperio del mal”, mientras Moscú caracterizaba a EE.UU. como un decadente imperio capitalista. Sin embargo, el colapso soviético acabó con esos distingos, y los intentos iniciales de cooperación en los años 90 dieron paso a una renovada tensión cuando la OTAN comenzó a expandirse hacia el Este, algo que Rusia percibió como una amenaza directa.
De acuerdo con la apreciación de Reuters, esta nueva percepción empieza implícitamente a reconocer que ambos países poseen esferas de influencia exclusivas, que deberían ser objetivamente respetadas. Cuando la estrategia estadounidense se refiere explícitamente a evitar que la OTAN sea vista como una alianza “en perpetua expansión”, el portavoz del Kremlin lo considera “alentador”, según recoge el artículo.
No obstante, Peskov también advirtió que en EEUU existe un “Estado profundo” que podría interpretar estas declaraciones de forma opuesta. Esta afirmación, según explican los autores del artículo de Reuters, hace referencia a una supuesta red de funcionarios enquistados en las instituciones estadounidenses que operan para mantener el statu quo, una noción frecuentemente esgrimida por Trump y sus aliados, pero que muchos analistas rechazan como teoría conspirativa sin fundamento.
De acuerdo a lo expresado por los autores, el documento estratégico estadounidense también reorienta el foco geopolítico hacia Asia y China, especialmente en torno al conflicto sobre Taiwán. Esta coincidencia estratégica se produce en un contexto en el que Rusia ha intensificado sus relaciones con China, debido a las sanciones impuestas por Occidente tras la anexión de Crimea en 2014 y la guerra en Ucrania desde 2022. Esta realineación geopolítica, según se interpreta en el texto, ha acercado los intereses estratégicos de Rusia y EE.UU. en al menos un aspecto: ambos consideran relevante evitar que Moscú y Pekín estrechen demasiado sus lazos.
El artículo de Reuters subraya cómo la nueva estrategia de seguridad de Estados Unidos, lejos de generar rechazo, ha sido acogida con simpatía por el Kremlin. Esta respuesta plantea interrogantes sobre las posibles coincidencias tácticas entre ambas potencias en un momento de cambios profundos en la política internacional.
Tanto el artículo de la Agencia Reuters como las opiniones emitidas por el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, podrían explicar la actitud mantenida por Rusia en la derrota fake del gobierno sirio de Bashar al-Ásad , así como su abstención en el Consejo de Seguridad en los temas relacionados con el reconocimiento de la ocupación marroquí del territorio saharaui pendiente de descolonización y el Plan Trump para Palestina.
POR MARTÍN ÁLVAREZ PARA CANARIAS SEMANAL.ORG
Según la Agencia de noticias Reuters, en una información titulada “El Kremlin afirma que la nueva estrategia de
seguridad de EE.UU. coincide en gran medida con la visión de Rusia” se ha presentado una valoración inusualmente positiva por parte del gobierno ruso hacia un documento estratégico elaborado por el antiguo rival geopolítico de Moscú, Estados Unidos.
Según los autores de la información, el Kremlin saludó con optimismo la nueva Estrategia de Seguridad Nacional presentada por Donald Trump, calificando su contenido como “coincidente en muchos aspectos con la perspectiva rusa".
Esta afirmación, realizada por el portavoz del Kremlin Dmitry Peskov, representa una ruptura con la retórica habitualmente dominante entre ambas potencias, tradicionalmente marcada por desconfianza y rivalidad abierta.
![[Img #88471]](https://canarias-semanal.org/upload/images/12_2025/997_diny.jpg)
El artículo resalta cómo la estrategia estadounidense, bajo el lema del “realismo flexible”, incluye elementos como la recuperación de la Doctrina Monroe del siglo XIX —que considera al hemisferio occidental bajo influencia directa de Washington— y señala a Europa como una región que enfrenta un “borramiento de la civilización”.
Además, el texto establece que la resolución del conflicto en Ucrania tiene un interés “central” para EE.UU., y manifiesta la voluntad de restablecer la estabilidad estratégica con Rusia.
De acuerdo con lo expresado por Reuters, este reconocimiento explícito por parte del Kremlin representa un giro llamativo, especialmente si se considera que durante décadas Moscú y Washington se enzarzaron en una narrativa ideológica hostil.
Durante la llamada Guerra Fría, Estados Unidos - expresa Reuters- definía a la URSS como un “imperio del mal”, mientras Moscú caracterizaba a EE.UU. como un decadente imperio capitalista. Sin embargo, el colapso soviético acabó con esos distingos, y los intentos iniciales de cooperación en los años 90 dieron paso a una renovada tensión cuando la OTAN comenzó a expandirse hacia el Este, algo que Rusia percibió como una amenaza directa.
De acuerdo con la apreciación de Reuters, esta nueva percepción empieza implícitamente a reconocer que ambos países poseen esferas de influencia exclusivas, que deberían ser objetivamente respetadas. Cuando la estrategia estadounidense se refiere explícitamente a evitar que la OTAN sea vista como una alianza “en perpetua expansión”, el portavoz del Kremlin lo considera “alentador”, según recoge el artículo.
No obstante, Peskov también advirtió que en EEUU existe un “Estado profundo” que podría interpretar estas declaraciones de forma opuesta. Esta afirmación, según explican los autores del artículo de Reuters, hace referencia a una supuesta red de funcionarios enquistados en las instituciones estadounidenses que operan para mantener el statu quo, una noción frecuentemente esgrimida por Trump y sus aliados, pero que muchos analistas rechazan como teoría conspirativa sin fundamento.
De acuerdo a lo expresado por los autores, el documento estratégico estadounidense también reorienta el foco geopolítico hacia Asia y China, especialmente en torno al conflicto sobre Taiwán. Esta coincidencia estratégica se produce en un contexto en el que Rusia ha intensificado sus relaciones con China, debido a las sanciones impuestas por Occidente tras la anexión de Crimea en 2014 y la guerra en Ucrania desde 2022. Esta realineación geopolítica, según se interpreta en el texto, ha acercado los intereses estratégicos de Rusia y EE.UU. en al menos un aspecto: ambos consideran relevante evitar que Moscú y Pekín estrechen demasiado sus lazos.
El artículo de Reuters subraya cómo la nueva estrategia de seguridad de Estados Unidos, lejos de generar rechazo, ha sido acogida con simpatía por el Kremlin. Esta respuesta plantea interrogantes sobre las posibles coincidencias tácticas entre ambas potencias en un momento de cambios profundos en la política internacional.
Tanto el artículo de la Agencia Reuters como las opiniones emitidas por el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, podrían explicar la actitud mantenida por Rusia en la derrota fake del gobierno sirio de Bashar al-Ásad , así como su abstención en el Consejo de Seguridad en los temas relacionados con el reconocimiento de la ocupación marroquí del territorio saharaui pendiente de descolonización y el Plan Trump para Palestina.































Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.140