UN ESTUDIO DEL INSTITUTO GERMANO MAX PLANCK, DESMONTA DEFINITIVAMENTE EL SILENCIO: EL NÚMERO DE ASESINADOS EN GAZA SUPERA LAS 112.000 VÍCTIMAS, LA MAYORÍA MUJERES Y NIÑOS
¿Nos encontramos ante una de las mayores masacres del siglo XXI?
¿Es posible que más de cien mil personas hayan sido asesinadas en Gaza en poco más de un año? ¿Puede una cifra de semejante magnitud pasar casi desapercibida en los grandes medios internacionales? Un nuevo informe elaborado por el prestigioso Instituto Max Planck para la Investigación Demográfica, con sede en Alemania, lanza una advertencia estremecedora: el número de palestinos muertos a causa de los ataques del ejército israelí podría superar ampliamente los 112.000 desde octubre de 2023.
REDACCIÓN CANARIAS SEMANAL.ORG
En un artículo publicado por el periódico británico Morning Star este miércoles 26 de noviembre, bajo el título de “German institute estimates number of Gazans killed by Israel tops 100,000”, se difunden las impactantes cifras de víctimas palestinas resultantes de la ofensiva militar israelí sobre la Franja de Gaza.
El artículo informa de una estimación realizada por el Instituto Max Planck para la Investigación Demográfica (MPIDR), uno de los centros científicos más prestigiosos de Alemania, que calcula que el número de personas asesinadas por Israel podría superar las 100.000 desde octubre de 2023.
Según el articulista del Morning Star, el estudio ofrece un rango de entre 99.997 y 125.915 muertos, con una estimación media de 112.069 víctimas. Este cálculo no sólo incluye las muertes directas provocadas por los bombardeos y ataques israelíes —que ascienden a 78.318 personas, según el informe—, sino también otras causas relacionadas con la guerra, como la destrucción del sistema sanitario, la falta de atención médica y las condiciones de vida extremadamente precarias impuestas por el asedio.
De acuerdo a lo expresado por la co-directora del estudio, Irena Chen, aunque nunca se podrá conocer el número exacto de muertos, el objetivo de la investigación es ofrecer una estimación lo más realista posible. Pero incluso más allá de las cifras, lo que resulta profundamente alarmante es el perfil demográfico de las víctimas: el análisis revela una distribución por edad y género similar a la documentada en genocidios anteriores según los estándares de Naciones Unidas.
Según mantiene el artículo, la destrucción casi total de la infraestructura en Gaza ha convertido al enclave palestino en un territorio inhabitable. El Ministerio de Salud de Gaza aporta una estimación propia, en la que denuncia que desde octubre de 2023 han muerto 69.775 personas, en su mayoría mujeres y niños, y más de 170.000 han resultado heridas. Además, señala un colapso drástico de la esperanza de vida en la Franja: una reducción del 44% en 2023 y del 47% en 2024, lo que equivale a una pérdida de más de tres décadas de vida por persona.
Según el artículo, la devastación ha sido tal que casi el 90% de la población gazatí —aproximadamente 1.9 millones de personas— ha sido desplazada. Muchos viven en tiendas improvisadas sin servicios básicos, sobre las ruinas de sus hogares destruidos por las bombas. Esta situación ha generado una crisis humanitaria de magnitud creciente, sin que los intentos internacionales de alivio hayan tenido éxito. Así lo denuncia el portavoz de Hamas, Hazem Qassem, quien afirma que el cerco israelí ha impedido cualquier avance en la ayuda humanitaria.
El autor del artículo recuerda también que, aunque las Naciones Unidas, expertos en derechos humanos, académicos especializados en genocidio y numerosos líderes internacionales han acusado a Israel de cometer un genocidio, el informe del Instituto Max Planck no se pronuncia sobre esta calificación jurídica. Sin embargo, los datos que ofrece pueden alimentar ese debate, ya que muestran patrones que, en otros contextos, han sido asociados a crímenes contra la humanidad.
Desde la Redacción de Canarias-semanal, consideramos que el trabajo del Instituto Max Planck es de suma importancia, no sólo por el reconocido rigor de su metodología científica, sino por su capacidad para romper el cerco mediático que ha silenciado sistemáticamente la dimensión real de la catástrofe en Gaza. Frente al apagón informativo impuesto por muchos medios hegemónicos, este tipo de investigaciones representan un ejercicio indispensable de responsabilidad académica y ética.
La magnitud de la gigantesca tragedia humana que se desarrolla en Gaza requiere una respuesta global urgente, no solo desde el plano humanitario, sino también desde el ámbito político y jurídico. La impunidad prolongada del Estado de Israel, la inacción de las grandes potencias y la tibieza de muchas instituciones internacionales no hacen sino agravar el sufrimiento de una población sometida a una agresión sistemática.
Documentar y denunciar estos hechos no es sólo una cuestión de solidaridad, sino un deber de conciencia ante uno de los crímenes más graves de nuestro tiempo.
REDACCIÓN CANARIAS SEMANAL.ORG
En un artículo publicado por el periódico británico Morning Star este miércoles 26 de noviembre, bajo el título de “German institute estimates number of Gazans killed by Israel tops 100,000”, se difunden las impactantes cifras de víctimas palestinas resultantes de la ofensiva militar israelí sobre la Franja de Gaza.
El artículo informa de una estimación realizada por el Instituto Max Planck para la Investigación Demográfica (MPIDR), uno de los centros científicos más prestigiosos de Alemania, que calcula que el número de personas asesinadas por Israel podría superar las 100.000 desde octubre de 2023.
Según el articulista del Morning Star, el estudio ofrece un rango de entre 99.997 y 125.915 muertos, con una estimación media de 112.069 víctimas. Este cálculo no sólo incluye las muertes directas provocadas por los bombardeos y ataques israelíes —que ascienden a 78.318 personas, según el informe—, sino también otras causas relacionadas con la guerra, como la destrucción del sistema sanitario, la falta de atención médica y las condiciones de vida extremadamente precarias impuestas por el asedio.
De acuerdo a lo expresado por la co-directora del estudio, Irena Chen, aunque nunca se podrá conocer el número exacto de muertos, el objetivo de la investigación es ofrecer una estimación lo más realista posible. Pero incluso más allá de las cifras, lo que resulta profundamente alarmante es el perfil demográfico de las víctimas: el análisis revela una distribución por edad y género similar a la documentada en genocidios anteriores según los estándares de Naciones Unidas.
Según mantiene el artículo, la destrucción casi total de la infraestructura en Gaza ha convertido al enclave palestino en un territorio inhabitable. El Ministerio de Salud de Gaza aporta una estimación propia, en la que denuncia que desde octubre de 2023 han muerto 69.775 personas, en su mayoría mujeres y niños, y más de 170.000 han resultado heridas. Además, señala un colapso drástico de la esperanza de vida en la Franja: una reducción del 44% en 2023 y del 47% en 2024, lo que equivale a una pérdida de más de tres décadas de vida por persona.
Según el artículo, la devastación ha sido tal que casi el 90% de la población gazatí —aproximadamente 1.9 millones de personas— ha sido desplazada. Muchos viven en tiendas improvisadas sin servicios básicos, sobre las ruinas de sus hogares destruidos por las bombas. Esta situación ha generado una crisis humanitaria de magnitud creciente, sin que los intentos internacionales de alivio hayan tenido éxito. Así lo denuncia el portavoz de Hamas, Hazem Qassem, quien afirma que el cerco israelí ha impedido cualquier avance en la ayuda humanitaria.
El autor del artículo recuerda también que, aunque las Naciones Unidas, expertos en derechos humanos, académicos especializados en genocidio y numerosos líderes internacionales han acusado a Israel de cometer un genocidio, el informe del Instituto Max Planck no se pronuncia sobre esta calificación jurídica. Sin embargo, los datos que ofrece pueden alimentar ese debate, ya que muestran patrones que, en otros contextos, han sido asociados a crímenes contra la humanidad.
Desde la Redacción de Canarias-semanal, consideramos que el trabajo del Instituto Max Planck es de suma importancia, no sólo por el reconocido rigor de su metodología científica, sino por su capacidad para romper el cerco mediático que ha silenciado sistemáticamente la dimensión real de la catástrofe en Gaza. Frente al apagón informativo impuesto por muchos medios hegemónicos, este tipo de investigaciones representan un ejercicio indispensable de responsabilidad académica y ética.
La magnitud de la gigantesca tragedia humana que se desarrolla en Gaza requiere una respuesta global urgente, no solo desde el plano humanitario, sino también desde el ámbito político y jurídico. La impunidad prolongada del Estado de Israel, la inacción de las grandes potencias y la tibieza de muchas instituciones internacionales no hacen sino agravar el sufrimiento de una población sometida a una agresión sistemática.
Documentar y denunciar estos hechos no es sólo una cuestión de solidaridad, sino un deber de conciencia ante uno de los crímenes más graves de nuestro tiempo.































juane | Jueves, 27 de Noviembre de 2025 a las 13:30:19 horas
Esperemos que este sea el principio del fin para la entidad ocupante sionista, a tenor de su esencia genocida delatada por esas abominables cifras. Y a posteriori para los infames Estados Unidos, su valedor mecenas.
Por el bien de la Humanidad
Accede para votar (0) (0) Accede para responder