
DENUNCIAN “ATAQUES MISÓGINOS Y AMENAZAS” CONTRA UNA EXPOSICIÓN FEMINISTA EN LA UNIVERSIDAD DE LA LAGUNA
Nuevo enfrentamiento entre las feministas “clásicas” y el "transfeminismo queer"
El colectivo Feministas Canarias ha denunciado la comisión de “actos vandálicos y amenazas” registrados durante la inauguración de la exposición “Momentos del Feminismo”, organizada el pasado 26 de noviembre en el Edificio Central de la Universidad de La Laguna (ULL).
Por EUGENIO FERNÁNDEZ PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
Mediante un comunicado remitido a Canarias-Semanal, el colectivo Feministas Canarias ha denunciado la comisión de “actos vandálicos y amenazas” registrados durante la inauguración de la exposición “Momentos del Feminismo”, organizada el pasado 26 de noviembre en el Edificio Central de la Universidad de La Laguna (ULL).
La exposición -apuntan desde este colectivo- "había sido creada para visibilizar la genealogía feminista desde la Revolución Francesa hasta la actualidad y fue organizada en el marco del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres”.
Uno de los paneles de la exposición, que hacía referencia al “borrado jurídico” de las mujeres debido a las leyes de autodeterminación de género, ha estado en el origen del conflicto.
Según el comunicado, tras la inauguración del evento comenzaron a circular denuncias en redes sociales acusando a la exposición de transfobia.
“Poco después -apuntan- un grupo de estudiantes irrumpió en el lugar amenazando con arrancar el panel si no se retiraba”.
Feministas Canarias denuncia que las organizadoras del evento fueron increpadas y posteriormente el panel en cuestión fue vandalizado.
El colectivo ha condenado estos hechos como "una forma de censura y violencia contra las mujeres que invisibiliza su trabajo y su historia" y como un verdadero “acto de misoginia”
“No vamos a tolerar – afirman - que nos intenten silenciar”.
ENFRENTAMIENTO ENTRE DOS CORRIENTES QUE NIEGAN A SUS ANTAGONISTAS
El conflicto creado en torno a la exposición de la ULL constituye una manifestación más del cisma que ha dividido profundamente al movimiento feminista en la actualidad.
El auge de un nuevo "transfeminismo", ligado a la ideología queer, ha terminado por provocar este enfrentamiento, aparentemente insalvable, entre quienes se han adscrito a esta corriente de corte postmoderno y las feministas "clásicas", adscritas, fundamentalmente, a distintas versiones del llamado "feminismo radical".
En este enconado enfrentamiento, manifestado particularmente en sus posturas antagónicas con respecto a las nuevas leyes trans -que permiten a cualquier persona autodeterminarse como mujer u hombre sin ningún tipo de requisito - las dos corrientes en disputa se reclaman como las auténticas representantes del feminismo y niegan a sus antagonistas la pertenencia a este movimiento.
Por un lado, la corriente queer descalifica a sus oponentes denominándolas "terfs", acrónimo de Trans-Exclusionary Radical Feminist, que en su traducción literal al español significa "Feminista Radical Transexcluyente". Los colectivos influidos por la ideología queer sostienen que sólo su planteamiento, "inclusivo" con las mujeres trans y las personas no binarias, sería fiel al verdadero "espíritu" del feminismo en el que - dicen- "deben caber todes".
Sus antagonistas, por el contrario, acusan a las defensoras de las “teorías” queer de actuar contra el feminismo y de tratar de imponer una nueva forma de "ideología patriarcal con purpurina, que "atenta contra los derechos de la mujer".
El enconado enfrentamiento entre estas dos facciones, en el que el debate ha sido sustituido - con unas pocas excepciones honrosas - por las descalificaciones mutuas, los insultos cruzados o las acusaciones de "promover el odio" y la "transfobia", ha dado lugar, en efecto, a diferentes episodios donde la confrontación ha llegado al plano físico.
En este sentido, diferentes colectivos contrarios a los planteamientos de la ideología queer han denunciado episodios similares al vivido en la Universidad de la Laguna, en la que activistas partidarias del transfeminismo habrían intentado evitar la celebración de exposiciones públicas o debates públicos por considerar que estos actos “atentan contra los derechos humanos” e incluso habrían llegado a agredir físicamente a algunas mujeres.
El incidente en la ULL, pues, es un reflejo más de esta fractura que se ha manifestado de manera visible en eventos como las marchas del 8 de marzo, en las que las dos corrientes enfrentadas convocan manifestaciones separadas con consignas dirigidas directamente contra la corriente adversa.
Por EUGENIO FERNÁNDEZ PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
Mediante un comunicado remitido a Canarias-Semanal, el colectivo Feministas Canarias ha denunciado la comisión de “actos vandálicos y amenazas” registrados durante la inauguración de la exposición “Momentos del Feminismo”, organizada el pasado 26 de noviembre en el Edificio Central de la Universidad de La Laguna (ULL).
La exposición -apuntan desde este colectivo- "había sido creada para visibilizar la genealogía feminista desde la Revolución Francesa hasta la actualidad y fue organizada en el marco del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres”.
Uno de los paneles de la exposición, que hacía referencia al “borrado jurídico” de las mujeres debido a las leyes de autodeterminación de género, ha estado en el origen del conflicto.
Según el comunicado, tras la inauguración del evento comenzaron a circular denuncias en redes sociales acusando a la exposición de transfobia.
“Poco después -apuntan- un grupo de estudiantes irrumpió en el lugar amenazando con arrancar el panel si no se retiraba”.
Feministas Canarias denuncia que las organizadoras del evento fueron increpadas y posteriormente el panel en cuestión fue vandalizado.
El colectivo ha condenado estos hechos como "una forma de censura y violencia contra las mujeres que invisibiliza su trabajo y su historia" y como un verdadero “acto de misoginia”
“No vamos a tolerar – afirman - que nos intenten silenciar”.
ENFRENTAMIENTO ENTRE DOS CORRIENTES QUE NIEGAN A SUS ANTAGONISTAS
El conflicto creado en torno a la exposición de la ULL constituye una manifestación más del cisma que ha dividido profundamente al movimiento feminista en la actualidad.
El auge de un nuevo "transfeminismo", ligado a la ideología queer, ha terminado por provocar este enfrentamiento, aparentemente insalvable, entre quienes se han adscrito a esta corriente de corte postmoderno y las feministas "clásicas", adscritas, fundamentalmente, a distintas versiones del llamado "feminismo radical".
En este enconado enfrentamiento, manifestado particularmente en sus posturas antagónicas con respecto a las nuevas leyes trans -que permiten a cualquier persona autodeterminarse como mujer u hombre sin ningún tipo de requisito - las dos corrientes en disputa se reclaman como las auténticas representantes del feminismo y niegan a sus antagonistas la pertenencia a este movimiento.
Por un lado, la corriente queer descalifica a sus oponentes denominándolas "terfs", acrónimo de Trans-Exclusionary Radical Feminist, que en su traducción literal al español significa "Feminista Radical Transexcluyente". Los colectivos influidos por la ideología queer sostienen que sólo su planteamiento, "inclusivo" con las mujeres trans y las personas no binarias, sería fiel al verdadero "espíritu" del feminismo en el que - dicen- "deben caber todes".
Sus antagonistas, por el contrario, acusan a las defensoras de las “teorías” queer de actuar contra el feminismo y de tratar de imponer una nueva forma de "ideología patriarcal con purpurina, que "atenta contra los derechos de la mujer".
El enconado enfrentamiento entre estas dos facciones, en el que el debate ha sido sustituido - con unas pocas excepciones honrosas - por las descalificaciones mutuas, los insultos cruzados o las acusaciones de "promover el odio" y la "transfobia", ha dado lugar, en efecto, a diferentes episodios donde la confrontación ha llegado al plano físico.
En este sentido, diferentes colectivos contrarios a los planteamientos de la ideología queer han denunciado episodios similares al vivido en la Universidad de la Laguna, en la que activistas partidarias del transfeminismo habrían intentado evitar la celebración de exposiciones públicas o debates públicos por considerar que estos actos “atentan contra los derechos humanos” e incluso habrían llegado a agredir físicamente a algunas mujeres.
El incidente en la ULL, pues, es un reflejo más de esta fractura que se ha manifestado de manera visible en eventos como las marchas del 8 de marzo, en las que las dos corrientes enfrentadas convocan manifestaciones separadas con consignas dirigidas directamente contra la corriente adversa.
Chorche | Martes, 03 de Diciembre de 2024 a las 20:25:03 horas
Divide y vencerás.
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