MILEI Y LA DERECHA RADICAL TOMAN POR ASALTO EL ESCENARIO POLÍTICO ARGENTINO... ¿CÓMO LO PUDO HACER? (VÍDEOS)
La derecha argentina toca las "fibras sensibles" y conquista a las masas
¿Cómo pudo la extrema derecha conquistar el corazón de Argentina en tan poco tiempo? ¿Es realmente Milei la respuesta a la crisis o el inicio de un nuevo capítulo de desafíos y conflictos? Los resultados de las primarias revelan un giro sorprendente en el mapa político del país. Un país agotado por las promesas no cumplidas que busca respuestas en propuestas radicalmente diferentes. ¿Pero entiende realmente Argentina a lo que se está suscribiendo? Victoria Martínez nos lo cuenta. El articulo está acompañado de dos videos documentales que ayudarán a conocer al personaje.
POR VICTORIA MARTÍNEZ PARA CANARIAS SEMANAL
El triunfo electoral de la derecha radical en las elecciones
primarias argentinas del pasado 13 de agosto, ha constituido en ese país un hecho histórico que ha conmocionado los cimientos del sistema político argentino.
Aunque el voto a Milei ha sido caracterizado como predominantemente masculino, joven y muy digital, en estas elecciones, en cambio, extendió también su rango a otras edades y clases sociales.
El resultado de los comicios no sólo es la factura esperada por el descontento, por la inflación, por la inestabilidad económica, o por la precarización laboral. Ha sido, también, la expresión manifiesta de un liderazgo intelectual sobre sectores populares a través de una interpelación política exitosa.
Después del fracaso de Macri y la impotencia de un Alberto envuelto en banderas supuestamente progresistas, Milei tomó la delantera, rechazando a ambos modelos.
Lo que desde ya se puede decir, sin embargo, es que la extrema derecha argentina ha reingresado gloriosa en el escenario político del país, transformándose, afrontando batallas de largo plazo y recurriendo al apoyo de los sectores populares. Con su proyecto está tratando de sustituir y radicalizar la oferta neoliberal. Sus ofertas de significados han reducido todo tipo de complejidades, otorgando una importancia preferente a aspectos del "mundo real".
Lo que ha revelado la reciente disputa electoral es la existencia de conflicto sobre la interpretación de la crisis. Por ello se hace preciso analizar cuáles son las interpretaciones en disputa. La derecha radical toma como antagonista radical al "Estado protector", al "Papá Estado", fuente de supuestos y gigantescos gastos y derroches. La derecha argentina en estas elecciones ha dejado claro que ha aprendido a tocar las "fibras sensibles" que hacen trinar a la gente.
Pero ¿cuál es la fibra que toca el antiestatismo en los sectores populares? Muy fácil. O muy facilón. La de un Estado injusto que los deja en la precariedad, mientras sindicalistas y piqueteros conservan privilegios. La de un Estado, feudo de los empleados públicos, que viven de los impuestos, mientras otros están resultando agobiados por ellos.
Es obvio que resulta más fácil apuntar a las instituciones públicas en general, que a aquellos que con su poder económico hacen disparar hacia arriba los precios. Los capitalistas han sabido presentarse ante la sociedad argentina, como "empresarios rehenes" de una burocracia que lo engulle todo, que se lo come todo, que lo dilapida todo.
La magia del asunto ha consistido en que la extrema derecha ha logrado dar "carta de naturaleza" a la imagen de una suerte de Estado, rehén de sindicalistas y políticos, y no de las grandes empresas y corporaciones. No se puede negar que la derecha ha sido capaz ejecutar un auténtico juego malabar, sin recurrir a uso ni de conejos ni chisteras.
Este "antiestatismo" ocasional, se ha alimentado de los discursos Alberto sobre un Estado vacío, pertrechado tan sólo con una de "redistribución" incapaz de satisfacer ni siquiera a los insatisfechos . "Si ese es el Estado, -han dicho los electores-, prefiero volarlo, hacerlo saltar por los aires". Ese fue mensaje electoral de las papeletas de millones.
La cuestión es que los "antiestatistas ocasionales", que son hoy legión, no han entendido que con un sistema económico capitalista como el que domina en la Argentina, sin la existencia de ese "Estado protector" se haría imperativa su sustitución por un "Estado represor". Eso nos permitiría entender cuál fue el mensaje oculto que contenían las tesis de Milei, favorables al uso individual de armas, a la reducción de la edad penal de los infractores o el uso de la violencia legal libérrimamente usada por el Estado.
La narrativa de la extrema derecha argentina de nuestros días, está basada en un relato que ha dado libre circulación a un conjunto de ideas que, en circunstancias distintas a las de ahora, tendrían serias dificultades para abrirse camino.
Ahora, de lo que se trata, es lograr difundir e implantar un nuevo "sentido común", que sea simultáneamente "ultraliberal", "autoritario" y "represivo", pero que permanezca fuertemente ensamblado con los sentimientos populares más primitivos.
Finalmente, el éxito de la sintonía de la extrema derecha con los sectores más jóvenes de la sociedad argentina tiene mucho que ver, posiblemente, con la carencia que estas franjas de edades carecen de un conocimiento de la historia de su propio país.
Esas "fracturas Alzheimer", cuando se producen en generaciones enteras, traen invariablemente este tipo de resultados, ganados a pulso, por cierto, por quienes les han precedido.
DOCUMENTOS: CONOZCA AL PERSONAJE
VIDEO 1: "MIS PADRES NO EXISTEN PARA MÍ"
VÍDEO 2: QUÉ PIENSA HACER EN ARGENTINA
POR VICTORIA MARTÍNEZ PARA CANARIAS SEMANAL
El triunfo electoral de la derecha radical en las elecciones
primarias argentinas del pasado 13 de agosto, ha constituido en ese país un hecho histórico que ha conmocionado los cimientos del sistema político argentino.
Aunque el voto a Milei ha sido caracterizado como predominantemente masculino, joven y muy digital, en estas elecciones, en cambio, extendió también su rango a otras edades y clases sociales.
El resultado de los comicios no sólo es la factura esperada por el descontento, por la inflación, por la inestabilidad económica, o por la precarización laboral. Ha sido, también, la expresión manifiesta de un liderazgo intelectual sobre sectores populares a través de una interpelación política exitosa.
Después del fracaso de Macri y la impotencia de un Alberto envuelto en banderas supuestamente progresistas, Milei tomó la delantera, rechazando a ambos modelos.
Lo que desde ya se puede decir, sin embargo, es que la extrema derecha argentina ha reingresado gloriosa en el escenario político del país, transformándose, afrontando batallas de largo plazo y recurriendo al apoyo de los sectores populares. Con su proyecto está tratando de sustituir y radicalizar la oferta neoliberal. Sus ofertas de significados han reducido todo tipo de complejidades, otorgando una importancia preferente a aspectos del "mundo real".
Lo que ha revelado la reciente disputa electoral es la existencia de conflicto sobre la interpretación de la crisis. Por ello se hace preciso analizar cuáles son las interpretaciones en disputa. La derecha radical toma como antagonista radical al "Estado protector", al "Papá Estado", fuente de supuestos y gigantescos gastos y derroches. La derecha argentina en estas elecciones ha dejado claro que ha aprendido a tocar las "fibras sensibles" que hacen trinar a la gente.
Pero ¿cuál es la fibra que toca el antiestatismo en los sectores populares? Muy fácil. O muy facilón. La de un Estado injusto que los deja en la precariedad, mientras sindicalistas y piqueteros conservan privilegios. La de un Estado, feudo de los empleados públicos, que viven de los impuestos, mientras otros están resultando agobiados por ellos.
Es obvio que resulta más fácil apuntar a las instituciones públicas en general, que a aquellos que con su poder económico hacen disparar hacia arriba los precios. Los capitalistas han sabido presentarse ante la sociedad argentina, como "empresarios rehenes" de una burocracia que lo engulle todo, que se lo come todo, que lo dilapida todo.
La magia del asunto ha consistido en que la extrema derecha ha logrado dar "carta de naturaleza" a la imagen de una suerte de Estado, rehén de sindicalistas y políticos, y no de las grandes empresas y corporaciones. No se puede negar que la derecha ha sido capaz ejecutar un auténtico juego malabar, sin recurrir a uso ni de conejos ni chisteras.
Este "antiestatismo" ocasional, se ha alimentado de los discursos Alberto sobre un Estado vacío, pertrechado tan sólo con una de "redistribución" incapaz de satisfacer ni siquiera a los insatisfechos . "Si ese es el Estado, -han dicho los electores-, prefiero volarlo, hacerlo saltar por los aires". Ese fue mensaje electoral de las papeletas de millones.
La cuestión es que los "antiestatistas ocasionales", que son hoy legión, no han entendido que con un sistema económico capitalista como el que domina en la Argentina, sin la existencia de ese "Estado protector" se haría imperativa su sustitución por un "Estado represor". Eso nos permitiría entender cuál fue el mensaje oculto que contenían las tesis de Milei, favorables al uso individual de armas, a la reducción de la edad penal de los infractores o el uso de la violencia legal libérrimamente usada por el Estado.
La narrativa de la extrema derecha argentina de nuestros días, está basada en un relato que ha dado libre circulación a un conjunto de ideas que, en circunstancias distintas a las de ahora, tendrían serias dificultades para abrirse camino.
Ahora, de lo que se trata, es lograr difundir e implantar un nuevo "sentido común", que sea simultáneamente "ultraliberal", "autoritario" y "represivo", pero que permanezca fuertemente ensamblado con los sentimientos populares más primitivos.
Finalmente, el éxito de la sintonía de la extrema derecha con los sectores más jóvenes de la sociedad argentina tiene mucho que ver, posiblemente, con la carencia que estas franjas de edades carecen de un conocimiento de la historia de su propio país.
Esas "fracturas Alzheimer", cuando se producen en generaciones enteras, traen invariablemente este tipo de resultados, ganados a pulso, por cierto, por quienes les han precedido.
DOCUMENTOS: CONOZCA AL PERSONAJE
VIDEO 1: "MIS PADRES NO EXISTEN PARA MÍ"
VÍDEO 2: QUÉ PIENSA HACER EN ARGENTINA






























jose antonio | Martes, 29 de Agosto de 2023 a las 13:05:56 horas
el 90 por ciento de las instituciones de Argentina. son de derechas o extrema derecha. Alfonsin el primer presidente despues de los miltares un conservador puro no tan reacio como no lo han pintado. por que despues entro un peronista. sus tintes eran de la ultra derecha. cuando entraron la familia de los kis.. eran de derechas un poco mas consensos. como su mujer. luego vino el macri. otro ultra derechista. Este ni se sabe lo que es el actual presidente. y si gana este sujeto echense a temblar no solo un ultra derechista. un visionario muy anormal. que cree. que esta por encima del resto. esque muchos progres han dicho y dicen que al fascismo lo tienen controlado. que contrlado ni ocho cuartos. a estos ni tirandoles la bomba atomica desaparecen.
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