
LA EMIGRACIÓN CLANDESTINA A VENEZUELA: CUANDO LOS CANARIOS FUIMOS ILEGALES EN "CAYUCOS"
"La emigración ilegal desde Canarias no era un fenómeno novedoso"
La emigración clandestina desde Canarias a Venezuela durante los años 40 y 50 del siglo XX fue un fenómeno particularmente importante en la historia de la migración isleña. La emigración ilegal desde Canarias no era un fenómeno novedoso. Ya durante los siglos XVI y XVII, la Corona española tuvo que aumentar la vigilancia en los puertos para evitar que los polizones embarcaran rumbo a las Indias.
Por ARTURO INGLOTT PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
Con la mejora de las condiciones climáticas, se prevé un nuevo incremento en la llegada a Canarias de inmigrantes de origen subsahariano. Un auténtico drama humano que, en el pasado año 2023, dejó más de 6.000 fallecidos registrados en esta "ruta canaria". Una de más letales del mundo en la actualidad .
Y, mientras algunos sectores hablan interesadamente de "avalancha de inmigrantes", los partidos políticos institucionales, e incluso la mayor parte de la ONGs que afirman preocuparse por la situación de estos migrantes, evitan mencionar, no casualmente, la responsabilidad directa que los países europeos, incluida España, continúan teniendo en la perpetuación del subdesarrollo y el saqueo de los países africanos que se encuentra en la raíz de este fenómeno migratorio.
A falta de esta explicación objetiva, no faltan tampoco los sectores que, de forma oportunista, tratan de presentar a esta inmigración -minoritaria en Canarias con respecto a la de origen europeo - como la supuesta causante de todos los males de nuestra sociedad.
Pocos son ya los que quieren acordarse, en este contexto, de que, no hace demasiado tiempo, muchos canarios fueron esos mismos emigrantes ilegales que, en sus propios cayucos, se jugaron también el todo por el todo para tratar de escapar de nuestra propia miseria y subdesarrollo.
LA EMIGRACIÓN CLANDESTINA A VENEZUELA
![[Img #75881]](https://canarias-semanal.org/upload/images/07_2023/645_elvirat.jpg)
Sobre uno de los principales destinos de los emigrantes Canarios durante la primera parte del siglo XX trata uno de los trabajos del historiador Néstor Rodríguez Martín.
La emigración clandestina desde Canarias a Venezuela durante los años 40 y 50 del siglo XX fue un fenómeno particularmente importante en la historia de la migración isleña.
Según Rodríguez Martín, que ha investigado ampliamente este tema, fue la última oleada de este tipo de migración desde Canarias hacia Venezuela, antes de que se produjera una nueva ola de emigración legal hacia la región occidental del país sudamericano.
La emigración ilegal desde Canarias no era un fenómeno novedoso. Ya durante los siglos XVI y XVII, la Corona española tuvo que aumentar la vigilancia en los puertos para evitar que los polizones embarcaran rumbo a las Indias. Durante el siglo XIX y principios del XX, la emigración clandestina creció de manera notable, sobre todo hacia Cuba.
Varios factores económicos y políticos provocaron la emigración clandestina durante el período posterior a la Guerra Civil Española. Las duras condiciones sociales y económicas de la postguerra, junto con el estancamiento de los salarios, controlados por mano de hierro por la dictadura para garantizar los intereses patronales, así como la creciente inflación, impulsaron a muchos canarios a buscar una vida mejor en Venezuela. Además, la persecución política bajo el régimen franquista también fue otro factor determinante.
La emigración legal a Venezuela también presentaba varias dificultades. No fue hasta 1949 que Venezuela estableció relaciones diplomáticas con el régimen franquista. Las autoridades españolas ponían trabas para la expedición de certificados de buena conducta, exigían un contrato de trabajo o una carta de llamada visada para emigrar legalmente, y el coste del pasaje en barco a menudo era inalcanzable para muchos.
Con pocas alternativas a la mano y sin perspectivas de mejora, los canarios de todas las islas comenzaron a ver en la emigración clandestina una luz de esperanza. A fines de la década de 1940 y principios de la de 1950, se organizaban expediciones en pequeñas embarcaciones, propiedad de armadores locales grancanarios o tinerfeños.
Estos viajes no estuvieron exentos de dificultades. Varios barcos tuvieron que ser abandonados en diferentes lugares y algunos, como el San José, zarpó pero nunca llegó a su destino. Sin embargo, la percepción de seguridad de la navegación a vela, la confianza en los vientos alisios y las corrientes ecuatoriales del norte, proporcionaban rutas favorables hacia América.
Pese a la dura realidad de estos viajes, muchos emigrantes clandestinos llegaron a su destino. La goleta Mariuchi se convirtió en la primera embarcación canaria en llegar con éxito a América con pasajeros clandestinos. Otros viajes exitosos incluyen la llegada del Arlequín a Juan Griego.
Muchas de estas expediciones clandestinas fueron organizadas por perseguidos o disidentes políticos, pero también hubo empresarios que se aprovecharon de la situación para su enriquecimiento personal. Y es que ayer, como hoy, las "mafias" de la migración no son la causa, sino la consecuencia de una realidad económica y social que, al provocar la necesidad de la migración crear también un "público objetivo" para quienes están siempre dispuestos a sacar provecho de la desgracia ajena.
Por ARTURO INGLOTT PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
Con la mejora de las condiciones climáticas, se prevé un nuevo incremento en la llegada a Canarias de inmigrantes de origen subsahariano. Un auténtico drama humano que, en el pasado año 2023, dejó más de 6.000 fallecidos registrados en esta "ruta canaria". Una de más letales del mundo en la actualidad .
Y, mientras algunos sectores hablan interesadamente de "avalancha de inmigrantes", los partidos políticos institucionales, e incluso la mayor parte de la ONGs que afirman preocuparse por la situación de estos migrantes, evitan mencionar, no casualmente, la responsabilidad directa que los países europeos, incluida España, continúan teniendo en la perpetuación del subdesarrollo y el saqueo de los países africanos que se encuentra en la raíz de este fenómeno migratorio.
A falta de esta explicación objetiva, no faltan tampoco los sectores que, de forma oportunista, tratan de presentar a esta inmigración -minoritaria en Canarias con respecto a la de origen europeo - como la supuesta causante de todos los males de nuestra sociedad.
Pocos son ya los que quieren acordarse, en este contexto, de que, no hace demasiado tiempo, muchos canarios fueron esos mismos emigrantes ilegales que, en sus propios cayucos, se jugaron también el todo por el todo para tratar de escapar de nuestra propia miseria y subdesarrollo.
LA EMIGRACIÓN CLANDESTINA A VENEZUELA
Sobre uno de los principales destinos de los emigrantes Canarios durante la primera parte del siglo XX trata uno de los trabajos del historiador Néstor Rodríguez Martín.
La emigración clandestina desde Canarias a Venezuela durante los años 40 y 50 del siglo XX fue un fenómeno particularmente importante en la historia de la migración isleña.
Según Rodríguez Martín, que ha investigado ampliamente este tema, fue la última oleada de este tipo de migración desde Canarias hacia Venezuela, antes de que se produjera una nueva ola de emigración legal hacia la región occidental del país sudamericano.
La emigración ilegal desde Canarias no era un fenómeno novedoso. Ya durante los siglos XVI y XVII, la Corona española tuvo que aumentar la vigilancia en los puertos para evitar que los polizones embarcaran rumbo a las Indias. Durante el siglo XIX y principios del XX, la emigración clandestina creció de manera notable, sobre todo hacia Cuba.
Varios factores económicos y políticos provocaron la emigración clandestina durante el período posterior a la Guerra Civil Española. Las duras condiciones sociales y económicas de la postguerra, junto con el estancamiento de los salarios, controlados por mano de hierro por la dictadura para garantizar los intereses patronales, así como la creciente inflación, impulsaron a muchos canarios a buscar una vida mejor en Venezuela. Además, la persecución política bajo el régimen franquista también fue otro factor determinante.
La emigración legal a Venezuela también presentaba varias dificultades. No fue hasta 1949 que Venezuela estableció relaciones diplomáticas con el régimen franquista. Las autoridades españolas ponían trabas para la expedición de certificados de buena conducta, exigían un contrato de trabajo o una carta de llamada visada para emigrar legalmente, y el coste del pasaje en barco a menudo era inalcanzable para muchos.
Con pocas alternativas a la mano y sin perspectivas de mejora, los canarios de todas las islas comenzaron a ver en la emigración clandestina una luz de esperanza. A fines de la década de 1940 y principios de la de 1950, se organizaban expediciones en pequeñas embarcaciones, propiedad de armadores locales grancanarios o tinerfeños.
Estos viajes no estuvieron exentos de dificultades. Varios barcos tuvieron que ser abandonados en diferentes lugares y algunos, como el San José, zarpó pero nunca llegó a su destino. Sin embargo, la percepción de seguridad de la navegación a vela, la confianza en los vientos alisios y las corrientes ecuatoriales del norte, proporcionaban rutas favorables hacia América.
Pese a la dura realidad de estos viajes, muchos emigrantes clandestinos llegaron a su destino. La goleta Mariuchi se convirtió en la primera embarcación canaria en llegar con éxito a América con pasajeros clandestinos. Otros viajes exitosos incluyen la llegada del Arlequín a Juan Griego.
Muchas de estas expediciones clandestinas fueron organizadas por perseguidos o disidentes políticos, pero también hubo empresarios que se aprovecharon de la situación para su enriquecimiento personal. Y es que ayer, como hoy, las "mafias" de la migración no son la causa, sino la consecuencia de una realidad económica y social que, al provocar la necesidad de la migración crear también un "público objetivo" para quienes están siempre dispuestos a sacar provecho de la desgracia ajena.
John Borg | Viernes, 31 de Mayo de 2024 a las 17:09:30 horas
FIDEL SOBRE LA EMIGRACION CANARIA A AMERICA LATINA Y CUBA:
“El Canario es el mas humilde de los inmigrantes, es laborioso, no rehúsa ningún trabajo, honesto, rectitud moral, no busca en ningún momento conflicto.”
El inmigrante Canario se integro muy bien en América latina y era mu querido, quizás en base a los méritos de los que hablaba Fidel.
Unos hicieron fortuna y regresaron a nuestra tierra Canaria con dinero ahorrado. Pero algunos otros y lo se de buena fuente no lograron el éxito económico que buscaron y regresaron con la sensación de fracaso de la experiencia latino-americana.
Pero a pesar de ese supuesto fracaso en enriquecerse, los canarios no cayeron salvo excepciones en la delincuencia, ni en el animó de vivir a cuenta de los residentes que les acogían en el país al que llegaban. Su humildad y rectitud le impedía el vivir a cuenta de otros así que preferían volver a su tierra.
Vaya esto para decir que coincido con el articulo en que la emigración es provocada por el expolio del colonialismo europeo en los pueblos del tercer mundo. Pero me parece que comparar la emigración Canaria con el fenómeno migratorio actual que sufrimos donde no coincidimos con los que llegan, ni en cultura, ni en religión ( COSA QUE SI TENIAN LOS CANARIOS EN LATINOAMERICA) y en muchos otros factores que provocan que no se integran bien, y que muchos al final dependan para vivir de las ayudas estatales que buenamente les podemos dar (cosa que puede llevar en casos al abuso de esas ayudas). Mientras Europa SE LAVA LAS MANOS.
Accede para votar (0) (0) Accede para responder