Juan Carlos Rangel • 7 hours ago
Realeza española? ...ladrones solo ladrones y parásitos reales.
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Lunes, 18 de Abril de 2022 Tiempo de lectura:
¿QUÉ ES LO QUE SE ESCONDE TRAS LA "DESAPARICIÓN DE LAS PIERNAS" DEL BORBÓNICO URDANGA?
Las redes sociales en habla castellana "se despelotan" con la extraña desaparición de las extremidades inferiores del "infantito"
Hay que reconocer que al auto desterrado "rey emérito" no le sale ni una derecha en sus movimientos estratégicos para ganarse un retorno "digno" a España. Dicen los especialistas en quiebros y requiebros palaciegos, que lo del "Urdanga" que "perdió las piernas", tiene una bien pertrechada trastienda. La autora de este artículo piensa, en cambio, que el asunto no pasa de ser sino el viejo cuento del "policía bueno" y del "policía malo" las viejas comisarías de la Brigada político social franquista.
POR CECILIA LARREA PARA CANARIAS SEMANAL:ORG.-
La pasada Semana Santa el ex monarca Juan Carlos Borbón, sus hijas y cinco de sus nietos se reunieron en Abu Dabi, donde éste, al parecer, ha decidido refugiarse de por vida para hacer frente con eficacia a los numerosos escándalos que faltan por conocerse, así como para poder responder con prontitud a las frecuentes citaciones que le convocarán a múltiples comparecencias desde instancias judiciales de todo el mundo.
Por alguna razón, el monarca quiso recoger en una instantánea fotográfica el evento del feliz reencuentro con los suyos. El pasado viernes, la foto fue difundida urbi et orbi a través de la oficiosa Agencia de Prensa española Europa Press. El monarca deseaba dejar constancia pública de que en estos difíciles momentos sigue contando con el fuerte apoyo de la inmensa mayoría de su borbónico clan.
Hasta aquí, todo casi normal. Decimos "casi" porque en el último momento, un "minúsculo" detalle vino a a tirarlo todo al suelo y, consecuentemente, a incendiar las redes sociales con burlas, chanzas, denuestos y otras maldiciones de honda raigambre antimonárquica.
Por no se sabe qué mágicas circunstancias, Pablo Urdangarín - el hijo del "cabroncete" Iñaki Urdangarin, según Juan Carlos I, (Pilar Eyre dixit)- apareció "sin piernas" en la foto difundida del encuentro. Véanlo ustedes mismos en la foto:
![[Img #71295]](https://canarias-semanal.org/upload/images/04_2022/6012_rey.jpg)
Ni que decir tiene que ello sirvió para que los comentarios en las redes sociales se reprodujeran como setas. En el hilo de los twiteos, los comentaristas internáuticos sugerían que se había tratado de un burdo "montaje de Photoshop".
Sin embargo, las opiniones al respecto no eran unánimes entre los twitteros. Había quienes afirmaban que las piernas del Urdangarín junior debían de haberse "quedado perdidas en algún paraíso fiscal". Otros, en cambio, llegaron a opinar que "además de la vergüenza, al Borbón le faltaban dos pies de su propio nieto".
La avalancha twittera, que llegó a asemejarse a un violento tsunami, debió provocarle el tembleque al "rey emérito" ante la posibilidad de que la gente llegar a creer que con la supuesta falsificación fotográfica se estaba intentando encubrir un hipotético accidente del nieto en uno de esos cruentos safaris que organiza el monarca para acabar con el resto de los elefantes que todavía quedan sobre nuestro planeta.
Sea por la razón fuera, el heredero directo del Caudillo de todas las Españas quiso rápidamente "poner las cosas en su sitio". Y para dejar constancia de que esta vez no había ni trampa ni cartón, difundió una nueva versión fotográfica del mismo encuentro familiar, pero en esta ocasión con las piernas de Pablo Urdangarín en el lugar donde le correspondían.
La verdad es que el"mosqueo" de los twitteros con los Borbones no es nuevo, viene de lejos. En el ya lejano año 2005, cuando la Casa Real gozaba del general despiste de la mayoría de los españoles, Juan Carlos ya había recurrido a un montaje similar, destinado a engañar a propios y a extraños. Al parecer, en esa ocasión, la artimaña corrió a cargo de la reina griega, muy aficionada a los "retoques" de Photoshop. Y a toque de pincel y de "corte y pega", Sofía logró también "reunir" a toda la familia en una enternecedora estampa correspondiente a las Navidades del citado año. Como ha quedado fehacientemente demostrado, los Borbones, a lo largo de los últimos siglos de sus despendolados reinados en España, han demostrado ser auténticos maestros en el uso prestidigitador de los toques de magia. O sea, de aquello del "¡¡nada por aquí, nada por allá !!".
¿QUÉ SE ESCONDE DETRÁS DE TODO ESTE EMBROLLO GRÁFICO?
Bueno, hasta aquí el revoloteo cachondo suscitado por la presunta falsificación. Sin embargo, según los "expertos" en asuntos palaciegos, que en estos últimos años han crecido como la espuma, mantienen que tras este supuesto equívoco se esconden otras cuitas más intrincadas. Cotillean los "especialistas" alegando que parapetadas tras estas bagatelas fotográficas se oculta, en realidad, un duro púgilato entre dos ramas enfrentadas de la Casa Real. Una de ellas, integrada por todos los que aparecen en la foto, y algunos más que están ausentes. La otra, capitaneada por propio Felipe VI, su amantísima madre, su esposa Leticia y sus hijas.
Explicaba el pasado sábado Pilar Eyre en un programa televisivo, que ambas facciones contendientes no paran de darse mamporros, -eso sí, con aristocrática elegancia- ,de tenderse trampas envenenadas y de "joderse la marrana" en cuanto tienen oportunidad. Según los lenguaraces, el encuentro en Abu Dabi formó parte de la estrategia del sector que apoya al "emérito". Con la "concentración" en el emirato árabe quiso dejarse patente que Juan Carlos sigue teniendo el apoyo de una parte importante de las baterías reales … y que cuidadin, cuidadin, con querer aislar social y dinasticamente a una de las facciones en beneficio de la otra.
Pero, ¿saben lo que les digo? Sinceramente, yo no me creo ninguna de estas elucubraciones. ¿Y si estuviera sucediendo en la Casa Real algo similar a lo que pasaba en las comisarías de la Brigada político-social del franquismo con aquella clásica engañifa del "policía bueno" y el "policía malo", para que quienes pasaban por el trullo, terminaran confiando en las supuestas virtudes del "policía bueno"? Y es que estos pejes de la aristocracia tienen sobre sus espaldas un aprendizaje centenario. Y de ellos, la verdad, yo no me fío ni un pelo.
Para sano deleite de los lectores de este digital y de este artículo, reproduzco algunos de los tweets con los que, sin recato alguno, los twiteros de habla castellana de todo el mundo, se atreven a festejar con chanza la desaparición de las extremidades inferiores del joven Pablo Urdangarin. ¡Hay que ver la mala leche que tienen!
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POR CECILIA LARREA PARA CANARIAS SEMANAL:ORG.-
La pasada Semana Santa el ex monarca Juan Carlos Borbón, sus hijas y cinco de sus nietos se reunieron en Abu Dabi, donde éste, al parecer, ha decidido refugiarse de por vida para hacer frente con eficacia a los numerosos escándalos que faltan por conocerse, así como para poder responder con prontitud a las frecuentes citaciones que le convocarán a múltiples comparecencias desde instancias judiciales de todo el mundo.
Por alguna razón, el monarca quiso recoger en una instantánea fotográfica el evento del feliz reencuentro con los suyos. El pasado viernes, la foto fue difundida urbi et orbi a través de la oficiosa Agencia de Prensa española Europa Press. El monarca deseaba dejar constancia pública de que en estos difíciles momentos sigue contando con el fuerte apoyo de la inmensa mayoría de su borbónico clan.
Hasta aquí, todo casi normal. Decimos "casi" porque en el último momento, un "minúsculo" detalle vino a a tirarlo todo al suelo y, consecuentemente, a incendiar las redes sociales con burlas, chanzas, denuestos y otras maldiciones de honda raigambre antimonárquica.
Por no se sabe qué mágicas circunstancias, Pablo Urdangarín - el hijo del "cabroncete" Iñaki Urdangarin, según Juan Carlos I, (Pilar Eyre dixit)- apareció "sin piernas" en la foto difundida del encuentro. Véanlo ustedes mismos en la foto:
Ni que decir tiene que ello sirvió para que los comentarios en las redes sociales se reprodujeran como setas. En el hilo de los twiteos, los comentaristas internáuticos sugerían que se había tratado de un burdo "montaje de Photoshop".
Sin embargo, las opiniones al respecto no eran unánimes entre los twitteros. Había quienes afirmaban que las piernas del Urdangarín junior debían de haberse "quedado perdidas en algún paraíso fiscal". Otros, en cambio, llegaron a opinar que "además de la vergüenza, al Borbón le faltaban dos pies de su propio nieto".
La avalancha twittera, que llegó a asemejarse a un violento tsunami, debió provocarle el tembleque al "rey emérito" ante la posibilidad de que la gente llegar a creer que con la supuesta falsificación fotográfica se estaba intentando encubrir un hipotético accidente del nieto en uno de esos cruentos safaris que organiza el monarca para acabar con el resto de los elefantes que todavía quedan sobre nuestro planeta.
Sea por la razón fuera, el heredero directo del Caudillo de todas las Españas quiso rápidamente "poner las cosas en su sitio". Y para dejar constancia de que esta vez no había ni trampa ni cartón, difundió una nueva versión fotográfica del mismo encuentro familiar, pero en esta ocasión con las piernas de Pablo Urdangarín en el lugar donde le correspondían.
La verdad es que el"mosqueo" de los twitteros con los Borbones no es nuevo, viene de lejos. En el ya lejano año 2005, cuando la Casa Real gozaba del general despiste de la mayoría de los españoles, Juan Carlos ya había recurrido a un montaje similar, destinado a engañar a propios y a extraños. Al parecer, en esa ocasión, la artimaña corrió a cargo de la reina griega, muy aficionada a los "retoques" de Photoshop. Y a toque de pincel y de "corte y pega", Sofía logró también "reunir" a toda la familia en una enternecedora estampa correspondiente a las Navidades del citado año. Como ha quedado fehacientemente demostrado, los Borbones, a lo largo de los últimos siglos de sus despendolados reinados en España, han demostrado ser auténticos maestros en el uso prestidigitador de los toques de magia. O sea, de aquello del "¡¡nada por aquí, nada por allá !!".
¿QUÉ SE ESCONDE DETRÁS DE TODO ESTE EMBROLLO GRÁFICO?
Bueno, hasta aquí el revoloteo cachondo suscitado por la presunta falsificación. Sin embargo, según los "expertos" en asuntos palaciegos, que en estos últimos años han crecido como la espuma, mantienen que tras este supuesto equívoco se esconden otras cuitas más intrincadas. Cotillean los "especialistas" alegando que parapetadas tras estas bagatelas fotográficas se oculta, en realidad, un duro púgilato entre dos ramas enfrentadas de la Casa Real. Una de ellas, integrada por todos los que aparecen en la foto, y algunos más que están ausentes. La otra, capitaneada por propio Felipe VI, su amantísima madre, su esposa Leticia y sus hijas.
Explicaba el pasado sábado Pilar Eyre en un programa televisivo, que ambas facciones contendientes no paran de darse mamporros, -eso sí, con aristocrática elegancia- ,de tenderse trampas envenenadas y de "joderse la marrana" en cuanto tienen oportunidad. Según los lenguaraces, el encuentro en Abu Dabi formó parte de la estrategia del sector que apoya al "emérito". Con la "concentración" en el emirato árabe quiso dejarse patente que Juan Carlos sigue teniendo el apoyo de una parte importante de las baterías reales … y que cuidadin, cuidadin, con querer aislar social y dinasticamente a una de las facciones en beneficio de la otra.
Pero, ¿saben lo que les digo? Sinceramente, yo no me creo ninguna de estas elucubraciones. ¿Y si estuviera sucediendo en la Casa Real algo similar a lo que pasaba en las comisarías de la Brigada político-social del franquismo con aquella clásica engañifa del "policía bueno" y el "policía malo", para que quienes pasaban por el trullo, terminaran confiando en las supuestas virtudes del "policía bueno"? Y es que estos pejes de la aristocracia tienen sobre sus espaldas un aprendizaje centenario. Y de ellos, la verdad, yo no me fío ni un pelo.
Para sano deleite de los lectores de este digital y de este artículo, reproduzco algunos de los tweets con los que, sin recato alguno, los twiteros de habla castellana de todo el mundo, se atreven a festejar con chanza la desaparición de las extremidades inferiores del joven Pablo Urdangarin. ¡Hay que ver la mala leche que tienen!
Gustavo | Martes, 19 de Abril de 2022 a las 23:20:48 horas
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