MERI PITA HUYE DEL NAUFRAGIO PODEMITA, PERO SE AFERRA AL SILLÓN DE DIPUTADA

Por CRISTÓBAL GARCÍA VERA PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-

  No hace falta ser un experto politólogo para apreciar que Podemos es, desde hace tiempo, un barco que  atraviesa un prolongado y agónico naufragio.

    La "marca" morada que fue capaz de  instrumentalizar el descontento popular para desactivarlo y reconducirlo hacia la instituciones del Régimen del 78, con una estrategia de marketing político populista, se encuentra ya finiquitada tras quedar en evidencia que se trataba de un mero producto de artificio. 

    Ello lo saben incluso los creadores del invento, que piensan ya a toda prisa en la confección de otra marca que la sustituya,  y lo corroboran tanto su permanente pérdida de apoyos electorales como los sondeos demoscópicos.  

   Y, como corresponde a una organización de puro aluvión, a la que acudieron oportunistas de todo tipo y calaña con el deliberado ánimo de medrar, este es el momento en el que todos se apresuran a abandonar el barco, no sin antes tratar de otear nuevas embarcaciones en las que continuar sus singladuras políticas personales.

    En este proceso acelerado de descomposición, la última en saltar del desvencijado Titanic morado ha sido la diputada canaria Meri Pita Cárdenes, que ha procedido a abandonar el grupo parlamentario que políticamente la parió, utilizando como excusa  una supuesta "deriva orgánica" del Partido que jura no compartir.

    Huelga decir, en cualquier caso, que a Pita Cárdenes ni se le ha pasado por la cabeza la posibilidad de renunciar al  escaño que consiguió como candidata del Partido creado por Pablo Iglesias, y que ha ocupado por la  Provincia de Las Palmas  durante 6 largos y bien remunerados años. En lugar de ello, la diputada ha anunciado su decisión de pasarse al grupo mixto, recibiendo por ello  justificadas acusaciones de ser una "tránsfuga" por parte de sus ya ex compañeros de Podemos Canarias.

LA JUSTIFICACIÓN OFICIAL DE LA DESBANDADA DE MERI PITA

   Meri Pita Cárdenas no ha dado este paso en solitario, sino apoyada por un colectivo de cargos públicos de Podemos en el Archipiélago, que han rubricado un escrito en el que afirman que

“después de un tiempo de debates y reflexión sincera, decidimos que nuestra acta de diputada en el actual Grupo Parlamentario de Unidas Podemos abandone la disciplina de dicho Grupo”.

    Entre los 12 firmantes del citado escrito se encuentra el teniente alcalde y concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria Javier Doreste. Un ex de Izquierda Unida que, tras  intentar colocarse infructuosamente en alguna bicoca institucional durante muchos años consiguió, por fin, ocupar  un hueco en el consistorio capitalino a través de la oportuna y oportunista creación de un "Partido instrumental" asociado a Podemos, al que también se sumó el historiador, afín al PSOE,  Sergio Millares.

   Tanto Meri Pita como “sus 12 firmantes” han tratado de justificar su decisión asegurando que - sin especificar en qué momento ni por qué -  "Podemos ha dejado de ser una herramienta de cambio y participación democrática".

   El caso es que, según Meri Pita Cárdenes, y quienes la apoyan,

"Podemos ya no es  una organización ni democrática ni mucho menos plurinacional” y su parte orgánica “está ahí con sus individualidades, sus miserias, sus manipulaciones, su sectarismo, sus cobardías y, cada vez más, sus proyectos biográficos mucho más que políticos, lejos -muy lejos- en cualquier caso, de los principios que nos trajeron a la lucha política”. 

   Pita y el resto de presuntos "desencantados" de último segundo aseguran también haber constatado que “la dirección del Grupo Parlamentario ha seguido la misma lógica que Podemos como partido político (...) se deshizo de la opinión de la gente, con una dirección que se colocó al margen de todo el mundo y en función de sus propios intereses”.

EL"AUTORITARISMO DICTATORIAL" DE MERI PITA DENUNCIADO POR SUS EX COMPAÑEROS

   Paradójicamente, Meri Pita menta ahora la soga en la casa del ahorcado.  Ella misma ha sido acusada, reiteradamente y con un abrumador consenso, de llevar a cabo estas mismas prácticas mientras  estuvo ejerciendo como Secretaria General de Podemos en Canarias e, incluso, antes de alcanzar dicho cargo.

   Poco después de la aparición de Podemos, cuando esta organización aún mantenía los llamados "círculos", prometiendo que  estos serían un "instrumento horizontal para el empoderamiento ciudadano", quienes participaron en los mismos en la Isla de Gran Canaria ya comenzaron a denunciar el "autoritarismo dictatorial" de la dirección encabezada por Pita Cárdenes.

   "Resulta difícil cuantificar - afirmaba entonces una joven que participó en el Círculo de  Las Palmas y antes formó parte del Movimiento 15M - la cantidad de gente que pudo mandar para su casa Meri Pita, por sus formas despóticas, desencantados y pensando que, realmente, todos los partidos políticos son iguales. No es solo que no le importara nada lo que pudieran opinar quienes no decían 'amén' a las directrices de su grupo, es que ni siquiera se molestaba en disimularlo y los despachaba con cajas destempladas”.

   Y es que la propia Pita, con un grupo cada vez más reducido de afines, no dudó en desembarazarse de manera inmisericorde de todos aquellos que osaron cuestionar su “legionaria” forma de dirigir la organización morada en el Archipiélago, jugando la baza de contar con el apoyo del fundador de Podemos, Pablo Iglesias, que por aquellas fechas éste ofrecía a quienes consideraba dignos de representar "franquicias" de su marca en las diversas provincias del Reino.

   Ejerciendo con mano de hierro esta gobernación otorgada de forma oficiosa, a Meri Pita nunca le tembló el pulso a la hora de expulsar de la organización a cualquiera que pudiera hacerle sombra o cuestionar sus planes, como sucedió con sus ex aliados del grupo "Sí se Puede", cuyo desembarco para hacerse con Podemos en la isla de Tenerife había promocionado ella misma.

  En febrero de 2016, el médico y militante del PCE Arturo Borges, que había pertenecido al grupo del mentor de Pita Cárdenes - el fallecido letrado grancanario Joaquín Sagaseta - denunciaba también públicamente que "en Podemos Canarias todo lo decidía la Secretaria General y sus adjuntos de confianza".

    A través de un contundente escrito publicado en el digital tinerfeño La Casa de mi tía,  Borges alertaba de que "el  Consejo Ciudadano Autonómico de Canarias era un auténtico fraude en cuanto que órgano colegiado de dirección autonómica partidaria”.

   "Todo lo que se refiere a sus atribuciones – afirmaba entonces Borges -  lo lleva un núcleo reducido, que ni siquiera es el teórico Consejo de Coordinación, conformado por la Secretaria General y sus "adjuntos" de la más estricta "confianza" y amistad. Este estilo de funcionamiento a mí no me merece otro calificativo que el de "amiguismo" tan sufrido en mis años de militancia en la "vieja política"".

    Según Arturo Borges, dicho núcleo había derivado ya en

"una organización puramente electoralista, centralista y vertical, que también se caracterizaba por su derechización socialdemocratizante en las cuestiones políticas e ideológicas".

EL DIA QUE PITA PERDIÓ EL APOYO DEL “MACHO ALFA”: QUIEN A HIERRO MATA, A HIERRO MUERE

   Lejos de ser novedosas, pues, las formas y la orientación ideológica de Podemos estaban presentes en esa organización desde sus orígenes, cuando la hoy diputada Pita Cárdenes ejercía como dirigente en el Archipiélago Canario.

   Tiempo después, Pita perdería el favor antes concedido por Pablo Iglesias, que el autodenominado "macho alfa" de este partido trasladó a la actual Secretaria General de Podemos Canarias, Noemí Santana.

   Con esta caída en desgracia, el posterior intento de Pita Cárdenes de volver a hacerse con el cargo que ahora ocupa la también diputada autonómica Santana fracasó estrepitosamente en el año 2020, cuando tuvo que retirar su plancha electoral de las primarias, no sin antes denunciar lo que otros ya habían denunciado en el pasado, cuando ella contaba con el respaldo del "aparato madrileño":  Que estas votaciones internas no ofrecían garantías de "limpieza, transparencia y neutralidad".

SIN DIFERENCIAS IDEOLÓGICAS NI PROGRAMÁTICAS: EL ENGAÑO SE PUEDE PERPETUAR

   Para justificar su decisión de abandonar el grupo parlamentario morado, convirtiéndose en una tránsfuga en el grupo mixto, Pita Cárdenas y sus 12 apoyos canarios sostienen que:  

   "no pueden callarse, ni conformarse, con acuerdos de mínimos que luego se publicitan como cambios de paradigmas o acuerdos históricos, pero que todas sabemos que no llegan a tapar la vergüenza de la claudicación: Sanidad, Pensiones, Vivienda, Ley Mordaza, el injustificable acuerdo en la renovación del Tribunal Constitucional, la Memoria Democrática, la vergonzosa política migratoria del gobierno, la ignominiosa posición del Gobierno sobre el Sahara... todo se reduce a mirar para otro lado abandonando nuestros compromisos electorales”".

   Sin embargo, un somero repaso a la trayectoria de Podemos y de la propia Meri Pita bastaría para constatar que las verdaderas razones de este movimiento no pueden tener que ver con una repentina "caída del caballo", con respecto a una orientación política que tiene largo recorrido.

   La realidad parece ser mucho más "pragmática".  Podemos – o Unidas Podemos -  se ha convertido en una vaca flaca que quienes han estado ordeñado durante estos años, con bien remunerados puestos institucionales, saben que ya no tiene más leche que ofrecer.

   No es descabellado pues que, como adelantan los ex compañeros de Podemos Canarias de Pita Cárdenes -que se han referido a la creación de un nuevo partido-  el movimiento de Pita  tenga que ver más con el plan de incorporarse a un nuevo proyecto electoralista, como el que en su día representó la formación morada. Dicho Partido podría tener la intención de sumarse a esa suerte de  "Frente Amplio" que pretende encabezar en los próximos comicios la actual vicepresidenta del gobierno, Yolanda Díaz que, por cierto,  no hurtó su apoyo a la estrategia belicista de la OTAN con respecto a la guerra de Ucrania.

   Sea como fuere, la mayor tragedia para nuestro país  consiste en que tras el patético final de travesía de Podemos – del que hemos venido advirtiendo en este diario digital desde la misma creación de ese partido, asumiendo por ello todo tipo de ataques- no se vayan a  extraer conclusiones sobre las catastróficas consecuencias  de depositar "esperanzas de cambio" en organizaciones carentes de  base social y proyectos de auténtica transformación social y con exclusivos fines electoralistas.