EE.UU. NO SE VA DE SIRIA: REFUERZA SU PRESENCIA CON OTROS 130 CAMIONES DE ARMAS

 Por A. RAMÍREZ / CANARIAS-SEMANAL.ORG.-

    Desde que comenzó el conflicto en Siria hace cuatro años, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha sido una de las principales fuentes de "confianza" para los medios occidentales. Esta organización asegura que la amplia red de contactos que posee en la región envía datos a su oficina central, que luego procesa y publica tanto en su sitio web como en sus cuentas de Facebook y Twitter.   En realidad - según desveló el conocido periodista y cineasta Nimrod Kamer mediante una investigación - el llamado "Observatorio Sirio para los DD.HH." se encuentra ubicado en en la ciudad británica de Coventry. Concretamente, en la casa del inmigrante sirio, Rami Abdel Rahman.

  Nadie sabe a ciencia cierta qué contactos tiene Rami Abdel Rahman sobre el terreno en Siria, pero la información que suministra, siempre contraria al gobierno de ese país y favorable a la intervención  extranjera, es consideraDA como "verdad indiscutible" en toda Europa y los Estados Unidos.

  Sin embargo, es justamente su identificación con los artífices de la guerra en Siria la que permite dar cierta credibilidad a la noticia que aportaba el pasado domingo, sobre la  llegada de 60 camiones de armas, municiones y equipamiento militar estadounidenses al sur de la provincia siria de Al-Hasaka (noreste), donde EE.UU. tiene una base militar creada sin autorización de Damasco.

  Con este nuevo envío, según el OSDH, la cifra de camiones de armas enviados en los últimos dos días por Washington a las regiones norteñas de Siria asciende a 130.

  Esos vehículos con armas, procedentes de la región del Kurdistán iraquí, han llegado al territorio sirio desde el cruce fronterizo de Semalka —sita en el norte de Siria—, controlado por las llamadas "Fuerzas Democráticas Sirias (FDS)", precisa el OSDH.

  Esto ocurre después de que Donald Trump anunciara, en diciembre del pasado 2018,  la retirada militar de Washington de Siria.

  El propio Observatorio Sirio para los Derechos Humanos reportó, el 25 de enero, que pese a la promesa de evacuar Siria de los uniformados estadounidenses, Washington envió tropas adicionales y 250 vehículos repletos de armas a sus bases en el Norte de Siria.

  Estados Unidos tiene desplegados más de 2.000 soldados en Siria, en su mayoría en el Norte del país, donde ha establecido sin autorización del Gobierno sirio unas 20 bases militares. Otra parte de sus efectivos se encuentra en la base de Al-Tanf, una región situada en el extremo suroriental de la provincia siria de Homs, a lo largo de las fronteras de Siria con Jordania e Irak.

  Damasco, que en su lucha contra el terrorismo cuenta con el apoyo de sus aliados, como Rusia e Irán, ha denunciado en un sinfín de veces la presencia militar ilegal de Estados Unidos en el suelo sirio, y ha advertido que Washington ha creado un agujero negro con miras a frenar el avance antiterrorista de las fuerzas sirias.