
LA CONDESA VON DER LEYEN QUIERE QUE LOS "PAÍSES PIGS" CUBRAN LAS NECESIDADES ENERGÉTICAS DE LOS GRANDES
Los denominados "paises pigs" son Portugal, Grecia y España.
Según la condesa y, no obstante, presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, los países que tuvieran poca dependencia del suministro de gas ruso, (como son Portugal, Grecia y España) tendrán que sumarse igualmente al resto del carro europeo de "ahorro" energético.. En principio, lo harán "voluntariamente", pero si las necesidades energéticas de la Unión Europea si vieran agravadas, tendrán que hacerlo "imperativamente".
POR ADAY QUESADA PARA CANARIAS SEMANAL
La condesa y, no obstante, también presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, manifestó en una entrevista realizada hace unas horas por la Agencia Alemana de Prensa (DPA), que el Kremlin "no es en absoluto un socio confiable para el suministro de energía a Europa". Y que por esa temible razón la Unión Europea está tratando de convertirse en entidad "totalmente independiente" del gas ruso antes de llegar al año 2027.
"En la actualidad, -dijo la aristócrata- Rusia está suministrando gas solo parcialmente, o no lo suministra en absoluto, a 12 Estados miembros… Por ese mismo motivo Europa debe estar preparada para el peor de los escenarios: un cese total del suministro de gas más pronto que tarde"
Ursula von der Leyen realizó esa afirmación, como si en el ínterin que va desde el actual 2022 al 2027, Europa estuviera en condiciones de poder resistir la catástrofe económica de magnitudes inimaginadas que ello supondría.
En opinión de von der Leyen, para intentar evitar ese colapso, Europa tendría que reducir en un 15 % su consumo de gas para marzo del próximo año, lo que supondrían 45.000 millones de metros cúbicos de gas.
Quien en su día, junto "nuestro" inefable Josep Borrell, defendiera la aplicación de drásticas medidas contra Rusia, sin haber sido capaz de prever el efecto boomerang que logicamente ello iba a provocar, dice ahora que:
"Cuanto más rápido actuemos, más ahorraremos y más seguros estaremos", afirmó con la seguridad de aquellos que sin duda no sufrirán los efectos de esos"ahorros".
Por si su propuesta careciera de suficientes bemoles, la condesa von der Leyen pidió además a los países que tuvieran poca dependencia de ese suministro de gas ruso, que ellos se sumaran igualmente al resto del carro europeo, agregándose al plan de ahorro energético, porque según la aristocrática condesa:
"no pueden evitar las consecuencias de un posible corte de suministro para el mercado interno".
Von der Leyen aseguró que las economías europeas están "fuertemente entrelazadas", por lo que en su opinión la crisis del gas afectará a todos los Estados miembros de una u otra forma. Y para redondear su aseveración la aristócrata redondeó su propuesta recurriendo a un argumento moral:
"La solidaridad energética es un principio básico de los tratados europeos"
Hace unos pocos días, von der Leyen presentó un plan de ahorro de gas que prevé una reducción voluntaria del consumo de hasta llegar a un 15 % por parte de los países miembros. La condesa describió su plan como "un instrumento de emergencia", por el cual todos los europeos deberían de reducir el uso del gas para el próximo mes de abril en nada menos que un 15%.
Tal reducción, aunque inicialmente tiene un carácter "voluntario", puede convertirse en "imperativo", -es decir, no voluntario- si llegara a empeorar la situación energética de la UE, hecho que nadie duda que se produzca.
Por lo pronto, y no se sabe durante cuánto tiempo, portugueses griegos y españoles, han hecho constar su desacuerdo con las recomendaciones de la condesa. Aunque teniendo en cuenta la calidad del percal de los resistentes, pocos son los que se atreven a augurar que esa actitud se podrá mantener en el tiempo.
POR ADAY QUESADA PARA CANARIAS SEMANAL
La condesa y, no obstante, también presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, manifestó en una entrevista realizada hace unas horas por la Agencia Alemana de Prensa (DPA), que el Kremlin "no es en absoluto un socio confiable para el suministro de energía a Europa". Y que por esa temible razón la Unión Europea está tratando de convertirse en entidad "totalmente independiente" del gas ruso antes de llegar al año 2027.
"En la actualidad, -dijo la aristócrata- Rusia está suministrando gas solo parcialmente, o no lo suministra en absoluto, a 12 Estados miembros… Por ese mismo motivo Europa debe estar preparada para el peor de los escenarios: un cese total del suministro de gas más pronto que tarde"
Ursula von der Leyen realizó esa afirmación, como si en el ínterin que va desde el actual 2022 al 2027, Europa estuviera en condiciones de poder resistir la catástrofe económica de magnitudes inimaginadas que ello supondría.
En opinión de von der Leyen, para intentar evitar ese colapso, Europa tendría que reducir en un 15 % su consumo de gas para marzo del próximo año, lo que supondrían 45.000 millones de metros cúbicos de gas.
Quien en su día, junto "nuestro" inefable Josep Borrell, defendiera la aplicación de drásticas medidas contra Rusia, sin haber sido capaz de prever el efecto boomerang que logicamente ello iba a provocar, dice ahora que:
"Cuanto más rápido actuemos, más ahorraremos y más seguros estaremos", afirmó con la seguridad de aquellos que sin duda no sufrirán los efectos de esos"ahorros".
Por si su propuesta careciera de suficientes bemoles, la condesa von der Leyen pidió además a los países que tuvieran poca dependencia de ese suministro de gas ruso, que ellos se sumaran igualmente al resto del carro europeo, agregándose al plan de ahorro energético, porque según la aristocrática condesa:
"no pueden evitar las consecuencias de un posible corte de suministro para el mercado interno".
Von der Leyen aseguró que las economías europeas están "fuertemente entrelazadas", por lo que en su opinión la crisis del gas afectará a todos los Estados miembros de una u otra forma. Y para redondear su aseveración la aristócrata redondeó su propuesta recurriendo a un argumento moral:
"La solidaridad energética es un principio básico de los tratados europeos"
Hace unos pocos días, von der Leyen presentó un plan de ahorro de gas que prevé una reducción voluntaria del consumo de hasta llegar a un 15 % por parte de los países miembros. La condesa describió su plan como "un instrumento de emergencia", por el cual todos los europeos deberían de reducir el uso del gas para el próximo mes de abril en nada menos que un 15%.
Tal reducción, aunque inicialmente tiene un carácter "voluntario", puede convertirse en "imperativo", -es decir, no voluntario- si llegara a empeorar la situación energética de la UE, hecho que nadie duda que se produzca.
Por lo pronto, y no se sabe durante cuánto tiempo, portugueses griegos y españoles, han hecho constar su desacuerdo con las recomendaciones de la condesa. Aunque teniendo en cuenta la calidad del percal de los resistentes, pocos son los que se atreven a augurar que esa actitud se podrá mantener en el tiempo.
Maribel Santana | Martes, 26 de Julio de 2022 a las 00:59:15 horas
Si la liante que ni sabe lo que dice, que no habla sino disparates y se cae por su propio peso. esta fascista que no quiere sino guerras, mas papista que el Papa, entre esta y Borrell, dos buenas patas pa un banco.
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