LA RAPIÑA ATLANTISTA CONTRA SIRIA NO CESA
Estados Unidos envía otro convoy de apoyo logístico y equipos militares a las zonas ricas en petróleo de Siria.
En una década la “revolución democrática siria” de la prensa occidental no se ha visto por ninguna parte. De lo que sí hemos sido testigos es del sistemático y planificado saqueo de los recursos energéticos aprovechando el caos provocado por la guerra impuesta al milenario país
Por JOSÉ MELQUIADES PARA CANARIAS SEMANAL. ORG.-
Diez años después del anuncio de llamada “la revolución democrática siria” (febrero de 2011) que la gran prensa atlantista y los medios de las monarquías del Golfo anunciaban a bombo y platillo se descubre, una vez más, como lo que realmente ha sido: una guerra por el control de las ingentes reservas de hidrocarburo de en el subsuelo sirio.
Según publica la televisión rusa, RT, en idioma árabe, -citando a fuentes locales- una caravana compuesta por 45 vehículos que transportaban equipos militares, combustible y vehículos con tracción en las cuatro ruedas (4WD) ingresó el pasado sábado 13 del presente mes al territorio sirio, a través del cruce fronterizo de Al-Walid, procedente de Irak.
Las fuentes consignan que dichos vehículos se encaminaron por la estratégica autopista M4 y entraron en las provincias ricas en petróleo de Al-Hasaka (noreste) y Deir Ezzor (región este del país), justo, donde Estados Unidos tiene desplegado cientos de soldados en sus bases militares ilegales.
De acuerdo con varias denuncias de las autoridades de Damasco, EE.UU. continúa enviando “suministros bélicos y logísticos a las zonas orientales y nororientales del país árabe, so pretexto de “proteger” los pozos petroleros ante las posibles invasiones de los grupos terroristas, pero, en realidad, lo que busca es robarse el oro negro de Siria”.
No hay que olvidar que EE.UU. y sus aliados, junto a las autoproclamadas Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), han trasladado, en numerosas ocasiones, el petróleo extraído del suelo sirio a la vecina Irak.
Por JOSÉ MELQUIADES PARA CANARIAS SEMANAL. ORG.-
Diez años después del anuncio de llamada “la revolución democrática siria” (febrero de 2011) que la gran prensa atlantista y los medios de las monarquías del Golfo anunciaban a bombo y platillo se descubre, una vez más, como lo que realmente ha sido: una guerra por el control de las ingentes reservas de hidrocarburo de en el subsuelo sirio.
Según publica la televisión rusa, RT, en idioma árabe, -citando a fuentes locales- una caravana compuesta por 45 vehículos que transportaban equipos militares, combustible y vehículos con tracción en las cuatro ruedas (4WD) ingresó el pasado sábado 13 del presente mes al territorio sirio, a través del cruce fronterizo de Al-Walid, procedente de Irak.
Las fuentes consignan que dichos vehículos se encaminaron por la estratégica autopista M4 y entraron en las provincias ricas en petróleo de Al-Hasaka (noreste) y Deir Ezzor (región este del país), justo, donde Estados Unidos tiene desplegado cientos de soldados en sus bases militares ilegales.
De acuerdo con varias denuncias de las autoridades de Damasco, EE.UU. continúa enviando “suministros bélicos y logísticos a las zonas orientales y nororientales del país árabe, so pretexto de “proteger” los pozos petroleros ante las posibles invasiones de los grupos terroristas, pero, en realidad, lo que busca es robarse el oro negro de Siria”.
No hay que olvidar que EE.UU. y sus aliados, junto a las autoproclamadas Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), han trasladado, en numerosas ocasiones, el petróleo extraído del suelo sirio a la vecina Irak.
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