ISRAEL PROSIGUE EL GENOCIDIO PALESTINO CON UN NUEVO BOMBARDEO SOBRE GAZA

   Por EVA LAGUNERO PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-

   El viernes de la semana pasada, Israel comenzó a bombardear la Franja de Gaza. Parece que no hay verano sin que el ejército israelí emprenda una campaña de muerte y destrucción en ese territorio asediado.

   Analistas palestinos e israelíes coinciden en que este último ataque no ha sido en respuesta a ningún tipo de provocación real o inventada. A principios de la semana, Israel detuvo en la ciudad de Jenin (Cisjordania ocupada) a Bassam el-Saadi, miembro prominente de la facción armada de la Yihad Islámica Palestina (en adelante YIP).

   Aunque no hubo ningún tipo de respuesta por parte de la organización, lsrael lanzó una serie de ataques aéreos sobre Gaza que acabaron con la vida de varios palestinos, incluido un alto mando de la YIP, Tayseer Jabari. En represalia, la YIP lanzó más de 100 cohetes sobre territorio israelí, que solo provocaron algún herido leve.

   Las autoridades israelíes justificaron el bombardeo diciendo que esta organización planeaba un ataque, pero no aportó ninguna prueba. No todo el mundo se cree esta alegación. Según el analista israelí Meron Rapoport, Israel trataba de provocar a la YIP por no haber respondido a la detención de Saadi, dado que el grupo solo lanzó cohetes después de que Israel bombardeara Gaza.

   Sami Abu Shehadeh, miembro palestino del parlamento israelí, condenó la operación militar en Gaza y dijo que era parte de la campaña electoral (en noviembre habrá nuevas elecciones) del Primer Ministro Yair Lapid y el ministro de Defensa, Benny Gantz:

   “La última agresión de Israel a Gaza muestra el deseo de Lapid y Gantz y de su coalición de gobierno de hacer cualquier cosa para mantenerse en el poder, incluso matar a una niña de cinco años. Este nuevo crimen de guerra es parte de la inmoral campaña electoral para mostrar que ellos pueden ser tan criminales como Benjamin Netanyahu” (principal rival y favorito en las encuestas).

   Recordemos que Netanyau, que ahora es líder de la oposición, dirigió tres campañas militares contra Gaza durante su mandato como primer ministro.

   Los tres días de bombardeos concluyeron con un alto el fuego promovido por Egipto, que entró en vigor el domingo pasado.

   Según el jefe de la YIP, Ziyad Nakhla, una de las condiciones de este alto el fuego es la liberación de dos militantes de la YIP arrestados por fuerzas israelíes en la Cisjordania ocupada. Uno de ellos, Khalil Awawdeh, que ha estado en huelga de hambre durante más de 145 días en protesta por su detención administrativa, debía ser trasladado al hospital el lunes y desde allí a su casa. El otro prisionero es el mencionado Bassam al-Saadi, con cuyo arresto en Jenin esperaba Israel que provocara algún tipo de respuesta por parte de la YIP. Pero no la hubo.

   Unas horas antes de que el alto el fuego entrara en vigor, varios bombardeos sobre Gaza mataron a nueve niños palestinos e hirieron a muchos otros. De un solo impacto cayeron cinco niños, de entre 5 y 14 años, mientras estaban sentados al lado de la tumba de su abuelo en el cementerio de Falluya, al norte de Gaza, según el testigo presencial Mohammad Sami, que dio sus nombres y edades y dijo que iban todos los días a sentarse allí, porque era una zona en la que estaban a salvo.

   Otra bomba cayó sobre un coche civil, matando a una persona al menos. Y otra mató a tres niños, todos hermanos, de la familia al-Nabahin, según el Ministro de Salud palestino.

   Mientras tanto, los cohetes palestinos disparados desde Gaza hacían blanco en el aeropuerto internacional Ben Gurion, cerca de Tel Aviv, dos de ellos al menos interceptados por la defensa aérea de Israel. El tráfico aéreo se interrumpió por un tiempo, pero no hubo que lamentar daños o heridos.

   El domingo por la tarde, otra ráfaga de cohetes cayeron sobre varias ciudades israelíes. Solo tres personas resultaron heridas leves.

   Ese mismo día se celebraron los funerales de los palestinos muertos el sábado, cuando Israel bombardeó dos áreas densamente pobladas de la Franja de Gaza, dejando al menos 14 muertos.

   Monira Nofal, tía de Khalil Abu Hamada, de 19 años, todavía en estado de shock declaró a la prensa que su sobrino cayó junto a otros cinco, incluidos cuatro niños, en un ataque israelí sobre el campo de refugiados de Jabalia, al norte de la franja: “Era el único hijo que tenían sus padres, que habían intentado durante más de 12 años tener un bebé”, declaró al medio Middle East Eye.

   En la ciudad de Rafah, al sur de Gaza, varias casas fueron bombardeadas. Los equipos de rescate sacaron los cuerpos atrapados bajo los escombros. Al menos 8 personas fallecieron, incluido un muchacho de 14 años. Según un testigo presencial, este ataque se realizó sin aviso previo.

   Mientras tanto, en Jerusalén oriental un grupo de al menos 1.700 ultra-nacionalistas israelíes, incluidos colonos, irrumpían el domingo por la mañana en la mezquita de Al-Aqsa. Protegidos por fuerzas israelíes fuertemente armadas, estuvieron tres horas en los patios de la mezquita haciendo oraciones y otros ritos religiosos e izando la bandera israelí, en contravención de los acuerdos firmados sobre este lugar sagrado.

   Los pocos devotos que se hallaban dentro de la mezquita fueron atacados por fuerzas israelíes. Fuera del templo, se produjeron choques entre los ultra-nacionalistas y los residentes palestinos de esa zona de Jerusalén donde varias familias palestinas están siendo desahuciadas de sus casas.

Fuente:

https://www.middleeasteye.net