LA IMPUNIDAD DE NETANYAHU: USO DE CIVILES COMO ESCUDOS HUMANOS EN GAZA
Israel sigue violando el derecho internacional sin consecuencias
En un contexto de constante conflicto en Gaza, surge la grave denuncia de que el Ejército israelí está utilizando a jóvenes palestinos como escudos humanos. ¿Qué dice el derecho internacional sobre esta práctica? ¿Por qué Netanyahu sigue desafiando las normas con impunidad?
Por A. RAMÍREZ PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
En un artículo publicado por Livia Castro en el diario Público, bajo el título "Las violaciones de derechos humanos en Israel son numerosas", la autora denuncia las múltiples violaciones del derecho internacional cometidas por el gobierno de Benjamin Netanyahu. En su texto, Castro subraya cómo estas prácticas afectan gravemente a la población civil palestina, en particular en la Franja de Gaza.
Según afirma la autora, el uso de civiles como "escudos humanos" por parte del Ejército israelí ha sido una de las tácticas más controvertidas. De acuerdo con lo expresado por Castro, jóvenes palestinos, como Mohammed Shubeir, son forzados a acompañar a soldados en zonas peligrosas y a realizar tareas extremadamente riesgosas. En el caso de Shubeir, un joven de solo 17 años, se le obligó a entrar a un edificio plagado de trampas explosivas, poniendo en peligro su vida. Castro resalta que esta práctica es una clara violación del derecho internacional humanitario, que prohíbe el uso de civiles en operaciones militares de esta índole.
La autora del artículo también menciona que, según una investigación publicada por The New York Times, los detenidos palestinos han sido forzados a explorar redes de túneles, localizar combatientes y mover objetos potencialmente explosivos. Según lo expresado por Castro, estos actos reflejan una brutalidad y deshumanización sistemática por parte del Ejército israelí, con la colaboración de agencias de inteligencia que operan bajo la supervisión del gobierno de Netanyahu.
Además de esta grave violación, el artículo señala el uso de armas prohibidas, como el fósforo blanco, en ataques recientes contra el Líbano. Castro denuncia que estas acciones no solo infringen las normas internacionales, sino que también contribuyen al trágico saldo de muertes en Gaza. Según la autora, en solo un año, casi 43.000 personas han sido asesinadas en esta región, muchas de ellas niños y niñas.
De acuerdo a lo expresado por Livia Castro, este panorama de constantes violaciones del derecho internacional y de derechos humanos exige una mayor atención y acción por parte de la comunidad internacional. Sin embargo, como indica la autora, hasta ahora, las respuestas han sido insuficientes, lo que permite a Netanyahu seguir actuando con impunidad.
Por A. RAMÍREZ PARA CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
En un artículo publicado por Livia Castro en el diario Público, bajo el título "Las violaciones de derechos humanos en Israel son numerosas", la autora denuncia las múltiples violaciones del derecho internacional cometidas por el gobierno de Benjamin Netanyahu. En su texto, Castro subraya cómo estas prácticas afectan gravemente a la población civil palestina, en particular en la Franja de Gaza.
Según afirma la autora, el uso de civiles como "escudos humanos" por parte del Ejército israelí ha sido una de las tácticas más controvertidas. De acuerdo con lo expresado por Castro, jóvenes palestinos, como Mohammed Shubeir, son forzados a acompañar a soldados en zonas peligrosas y a realizar tareas extremadamente riesgosas. En el caso de Shubeir, un joven de solo 17 años, se le obligó a entrar a un edificio plagado de trampas explosivas, poniendo en peligro su vida. Castro resalta que esta práctica es una clara violación del derecho internacional humanitario, que prohíbe el uso de civiles en operaciones militares de esta índole.
La autora del artículo también menciona que, según una investigación publicada por The New York Times, los detenidos palestinos han sido forzados a explorar redes de túneles, localizar combatientes y mover objetos potencialmente explosivos. Según lo expresado por Castro, estos actos reflejan una brutalidad y deshumanización sistemática por parte del Ejército israelí, con la colaboración de agencias de inteligencia que operan bajo la supervisión del gobierno de Netanyahu.
Además de esta grave violación, el artículo señala el uso de armas prohibidas, como el fósforo blanco, en ataques recientes contra el Líbano. Castro denuncia que estas acciones no solo infringen las normas internacionales, sino que también contribuyen al trágico saldo de muertes en Gaza. Según la autora, en solo un año, casi 43.000 personas han sido asesinadas en esta región, muchas de ellas niños y niñas.
De acuerdo a lo expresado por Livia Castro, este panorama de constantes violaciones del derecho internacional y de derechos humanos exige una mayor atención y acción por parte de la comunidad internacional. Sin embargo, como indica la autora, hasta ahora, las respuestas han sido insuficientes, lo que permite a Netanyahu seguir actuando con impunidad.
Mis asuntos | Domingo, 20 de Octubre de 2024 a las 21:29:38 horas
El trabajo realizado por este psicópata es excelente. Según los parámetros europillos y gringos, claro, ha superado todos los estándares de destrucción otánicos y de exterminio del diferente. Y estos ya estaban altos, incluso con el moreno y sus drones selectivos, era muy normal reventar invitados a una boda en Afganistán por ejemplo, ellos les llamaban víctimas o daños colaterales. En el caso de este individuo, no hay tales víctimas, son terroristas o potenciales terroristas en un futuro que hay que eliminar de raiz, hoy son niños, mañana Sinwares. Es el nazismo revisitado y puesto al día gracias a toneladas de explosivos, más de 80 se utilizaron para acabar con Nasrallah, y con todos los de alrededor. Este tipo no tiene alma ni corazón, es un supremacista nato, el que muestra un mayor nivel de racismo y odio al diferente del planeta, y no tiene cabida en un mundo donde la dignidad, la moral y la justicia deben ser lo más importante en la vida de los seres humanos. Hoy, el mal se ha confabulado en una conspiración muy real para arrastrar a la humanidad a guerras y crímenes de toda índole, en el caso que nos ocupa, estos emigrantes europillos de Europa del Este llevan colonizando y asesinando nativos casi 80 años con el apoyo de los dirigentes occidentales, en una de sus mejores temporadas de sangre, conmoción y pavor. Y eso que las han tenido fuertes, siempre por la necesidad de espacio vital, recursos o energía, todo típico del capitalismo de eterno crecimiento. Esa es la bestia, con la que hay que acabar, y estos asesinos sus herramientas para seguir con su rueda aplastando y triturando seres humanos. O acabamos con ellos, o acabarán con nosotros.
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